Thibaut Courtois volvió a vestirse de héroe en una noche crucial para el Real Madrid. El portero belga igualó un récord histórico del club al alcanzar los tres penales atajados en la Copa de Europa, misma cifra que ostenta la leyenda blanca Iker Casillas. La hazaña ocurrió durante el primer tiempo del partido de vuelta de los Cuartos de Final de la Champions League frente al Arsenal, en el estadio Santiago Bernabéu.
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El momento clave llegó cuando el árbitro señaló la pena máxima tras una polémica jugada en el área madridista. Bukayo Saka, encargado de ejecutar el penal, optó por un disparo suave, con intención de engañar al portero al estilo "Panenka". Sin embargo, Courtois leyó perfectamente la intención del delantero inglés y se lanzó hacia su derecha, alcanzando el balón con la mano izquierda y desviándolo, para mantener el cero en su portería.
La atajada no solo impidió que el conjunto londinense ampliara su ventaja global, sino que también renovó las esperanzas del equipo dirigido por Carlo Ancelotti. Tras haber sido goleado 3-0 en el partido de ida en el Emirates Stadium, el Real Madrid necesita tres goles en casa para igualar la serie y forzar una prórroga, o cuatro para avanzar a las semis.
Con esta intervención, Courtois demuestra nuevamente su capacidad para aparecer en los momentos de mayor presión y cuando "Carletto" más le necesita. Su récord igualado a Casillas no es solo una estadística más, sino un reflejo del peso que ha tenido en la historia reciente del club en la máxima competición europea. A falta de los segundos 45 minutos, la afición blanca se aferra a su guardameta como símbolo de esperanza para una nueva remontada histórica en el Bernabéu.