Samuel Aldrey /@SamuelAldrey
La Vinotinto sufre demasiado atrás. Sufre en el juego aéreo, sufre en la anticipación de jugadas, sufre en el 1 vs 1, sufre en la salida. La defensa no ha tenido seguridad ni constancia en este ciclo premundialista, pero Leonardo González recupera a un jugador que puede remediar un poco la inseguridad atrás: Yordan Osorio (Barinas, 1994).
El espigado y herculino central barinés tiene desde el 17 de noviembre de 2020 sin jugar con la selección. Una lesión en el tobillo lo alejó de las canchas con el Parma y con el combinado nacional. Ahora regresa para ayudar a una zaga defensiva que hace aguas en el juego aéreo. El equipo necesita una piedra angular en su sistema defensivo y Osorio es el hombre. Así lo muestran sus estadísticas previas a su lesión.
El partido de Chile en el Olímpico, su último con la selección, fue de esos partidos en los que el comodín Vinotinto se las tenía tiesas con los delanteros que le exigen lo mejor que lleva dentro por culpa de los once centímetros de diferencia que les separan. Del sufrimiento de los primeros regates en el 1 vs 1 a la eficacia del martilló pilón en el resto del encuentro. Alexis Sánchez prefería buscar la zona de Wilker Ángel. Osorio estuvo en plan káiser y contra Ecuador podría hacer su retorno.
Puntos fuertes.
Su enorme envergadura y altura (1,86 centímetros) le aseguran ser uno de los defensores centrales más poderosos en el aire. Esto ayuda en los duelos aéreos, donde muestra una fuerza colosal. Algo que la selección agradece, pues el juego aéreo ha sido una enfermedad incurable y él puede ser un arma antiaérea.
Osorio tiene un alto índice de éxito al pelear el balón en la altura /Elaboración propia. Datos: Statsbomb
Como muestra el gráfico Osorio está entre los centrales de CONMEBOL que más duelos en las alturas gana (%68). Realizó 66 duelos y ganó 44. Solo le superan Cristian Romero (Argentina), Diego Godín (Uruguay), José María Giménez (Uruguay), Yerry Mina (Colombia) y Eder Militao (Brasil).
Además, es lo suficientemente fuerte como para luchar con el más poderoso de los delanteros, mientras que es lo suficientemente ágil para cambiar de dirección rápidamente si necesita competir por la segunda jugada.
Osorio fue uno de los centrales sudamericanos que en la temporada 2020/2021 más veces presionó y más robos registró /Elaboración propia. Datos Statsbomb
El jugador de 27 años ha ganado más presiones 76 y dominado a cada delantero al que se enfrentó e intentó driblarlo (38,1 % de acierto). Además, es uno de los que menos veces fue rebasado por un rival (16).
Osorio es también un defensor increíblemente inteligente en la lectura de sus acciones. Cuando se enfrenta a atacantes veloces y directos siempre se da suficiente espacio para cubrir los movimientos en la parte posterior. Si necesita salir al cruce, puede hacerlo haciendo uso de su gran tamaño para bloquear carreras hacia adelante. Lo suele conseguir sin la necesidad de tener que ir al suelo para frenar a su oponente.
Solo dos tarjetas amarillas le sacaron y realizó más faltas que Marquinhos o Militao (16). Todos los centrales tienen más de 1100 minutos disputados /Elaboración propia. Datos: Statsbomb
Esta habilidad lo hace que su recuperación sea con pocas faltas (como muestra el gráfico) y fue además uno de los centrales que menos tarjetas recibió la temporada 2020-2021 cuando estaba en la Serie A con el Parma (2). En cambio, Diego Carlos (Sevilla) y Cristian Romero (Tottenham), fueron de los centrales que más ajusticiaron a sus rivales y que más veces fueron juzgados por el árbitro.
A sus habilidades defensivas suma una gran relación con el balón. Reconoce los mejores momentos para pasar al mediocampo y progresar con el balón controlado. Esta opción de salida desde atrás aporta al juego del Parma estabilidad y seguridad, evitando pérdidas cerca de su portería.
La precisión en el pase de Osorio bastante alte 90% y registra una buena cantidad de pases progresivos al campo rival (38) /Elaboración propia. Datos: Statsbomb
Osorio tiene un 90% de acierto en el pase y acumula 38 pases progresivos en un equipo que no acostumbra a salir con el balón controlado. Además, es uno de los centrales que más dribles (16) realiza para sacarse la presión que constantemente recibió en la Serie A y con un alto porcentaje de éxito (). En el drible es en una de las facetas que más destaca por sobre los demás defensores y es una muestra de su enorme capacidad individual y su cabeza fría en situaciones riesgosas.
Osorio solo queda por detrás del argentino Foyth (Villareal) en dribles realizados y exitosos /Elaboración propia. Datos: Statsbomb
Aspecto a mejorar.
Si hay un área en la que Yordan Osorio puede tener algunos problemas es cuando el rival ataca su costado de la selección entre él y el habitual lateral derecho Ronald Hernández. Cuando enfrentan diagonales desde la izquierda, el jugador barinés a menudo tiene que manejar el espacio que se abre por esa zona.
Cuanto más grande sea este espacio, es probable que deje más espacio a su espalda, como ocurrió ante Brasil. A pesar de ello tiene una alta percepción del espacio y es uno de los centrales que más pases intercepta entre los centrales sudamericanos.
Osorio brilla en cortar las líneas de pase rival /Elaboración propia. Datos: Statsbomb
Una situación de juego crucial que el barinés domina a la perfección. Solo le superan tres centrales en esta métrica: Foyth (Villareal), Godín (Cagliari) y Romero (Tottenham). Osorio brilla incluso a nivel cognoscitivo al anticipar correctamente las intenciones del rival y recupera el esférico en una situación privilegiada para su equipo, pues permite realizar una transición veloz con el equipo contrario abierto e indefenso.
Su regreso a la Vinotinto es un bálsamo.
La temporada pasada, previo a su lesión, sus números como ven son bastante buenos. Osorio trajo al Parma un poco más de seguridad y estabilidad al centro de la defensa sin importar quién juegue a su lado. En la selección compartirá la zaga con Nahuel Ferraresi que ha tenido un gran nivel defensivo en la Eliminatoria, exceptuando el partido ante Chile en Santiago.
Osorio espera volver a su máxima expresión futbolística. Velocidad punta; anticipación, su mejor virtud; colocación; juego aéreo; buena salida de balón y hasta oportunismo para hallar centros en el área rival. Tenerlo de vuelta es un bálsamo para un equipo que necesita más solidez en la defensa.
Una buena noticia su recuperación previo al partido de este jueves 11 de noviembre ante Ecuador.
Metodología*: Los datos son de la empresa especializada en estadística avanzada Statbomb. Las métricas se expresan por 90 minutos de juego en la últimas edición de competiciones domésticas (2020-21). La selección de jugadores que se muestran sigue dos criterios: son todos defensores centrales con buenas cifras en intercepciones y juego aéreo (más de 4.4 por partido). Además, se toma en especial consideración que son únicamente jugadores de CONMEBOL, teniendo en cuenta que se jugara la fecha de eliminatorias a Catar 2022.