Es oficial: hay sorpresas en el once que sacará el FC Barcelona para enfrentar a su similar de Alavés, al menos, desde el dibujo táctico, porque el técnico Xavi Hernández decidió mover al equipo, más allá de nombres, en lo posicional y se la jugará con una apuesta inusual en el mediocampo.
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El entrenador decidió poner músculo en la sala de máquinas, pero sorprende que el perfil de jugador que escogió viene desde la zona menos esperada. Y es que, todo apunta a que el mediocentro del equipo el día de hoy será el zaguero Andreas Christensen, quien dejará los espacios en la defensa para el portero Iñali Peña, Jules Koundé en banda derecha, Joao Cancelo en la izquierda, mientras en el carril central estén Ronald Araújo y el juvenil Pau Cubarsí.
La decisión de Xavi en el medio con Christensen tiene la pinta que busca proteger a los 'jugones' del mediocampo: Pedri, De Jong y Gundogan, hoy titulares también, quienes han venido sufriendo los desajustes defensivos en las corridas rivales, además, de no ser la faceta que mejor dominan. Es, entonces, cuando la idea del entrenador cobra sentido, con un zaguero para cubrir sus espaldas, además, de que el danés cuenta con buen pie para la salida de balón y en el pasado ya desempeñó este lugar en algún cotejo con su anterior escuadra: el Chelsea.
Finalmente, en ataque, estarán dos de los fijos en las alineaciones: Robert Lewandowski y Lamine Yamal, dejando en la recámara del banquillo de suplentes a Vitor Roque, salvador en el último encuentro culé, marcando el solitario gol para ganar a Osasuna (1-0).
Ahora mismo, el Barcelona cuenta con 47 puntos en La Liga y ocupa la tercera casilla con el Atlético de Madrid, por tanto, necesitan una victoria para seguir en carrera por el liderato, hoy en poder del Real Madrid, con 57 unidades, seguidos de Girona con 55.