Stefano Malavé Macri. Twitter: @StefanoMalaveM
La Gran Final de la Liga FUTVE se disputó este domingo 30 de octubre en el Estadio Olímpico de la Universidad Central de Venezuela, el cual albergaría su cuarta final consecutiva en el balompié nacional. Los protagonistas de este duelo decisivo fueron Metropolitanos y Monagas, quienes tienen su cupo asegurado en la fase de grupos de la Copa Libertadores.
Poco más de once mil personas presenciaron un intenso choque entre dos escuadras que se negaban a ceder espacios y que ejercieron presión constante durante los noventa minutos. La defensa de ambos elencos evitó cada una de las ocasiones de sus rivales, motivo por el cual el partido se fue a la prórroga con marcador de 0-0.
En el tiempo extra, llegó el primer gol del partido en favor del conjunto visitante. Edanyilber Navas tomaría por sorpresa a Giancarlo Schiavone a los dos minutos del primer silbatazo de Jesús Valenzuela después del tiempo reglamentario. Sin embargo, pocos minutos después, Carlos Cermeño, quien inició su carrera en Monagas, centró un balón potente a Charlis Ortiz para que este igualara las acciones. Posterior a la llegada de los goles, se aumentó la intensidad ofensiva, pero esto no evitó que el FUTVE viviese una tanda de penales en su segunda final consecutiva.
Tanto porteros como pateadores llenaron de tensión las gradas del Estadio Olímpico por la incertidumbre de cuál equipo se sumaría la estrella del fútbol venezolano. Finalmente, Carlos Cermeño sería el encargado de cobrar el quinto penal por parte del cuadro capitalino y no desperdiciaría la oportunidad de darle su primer título a Metropolitanos.
"Creo que era un partido especial, aparte de ser una final, era un partido contra el equipo que me vio debutar", declaró Carlos Cermeño, jugador nacido en Maturín, estado Monagas, y uno de los responsables de la victoria del cuadro violeta.