El exfutbolista del FC Barcelona, Gerard Piqué, ha sido imputado este jueves por el caso de corrupción en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). La jueza titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda, Delia Rodrigo, que investiga el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí ha citado al exfutbolista en calidad de investigad, ya que podría haber pactado una comisión anual de 4 millones de euros por este acuerdo.
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La jueza toma esta decisión como consecuencia de las diligencias de instrucción previamente acordadas y tras la recepción de nuevos informes de la Policía, que añaden diversa documentación incautada en los registros practicados en la sede de la Federación Española y el domicilio de Luis Rubiales en Granada el pasado 20 de marzo.
Dichos registros, dieron inició a la denominada “Operación Brodie”, derivaron en varias detenciones, entre ellas las de Tomás González Cueto, asesor legal de la Federación, José Javier Jiménez, director de recursos humanos de la RFEF, Pedro González Segura, director de los servicios jurídicos, y su hermano Ángel, directivo de la constructora Gruconsa.
Monto de las supuestas comisiones
“Tanto en el contrato como en la adenda, se incluyó además una cláusula que se denominó “esencial”, por la que la RFEF trataba de garantizar el pago de la comisión de 4.000.000€ anuales a favor de Kosmos, aun cuando esta empresa formalmente sería la comisionista de SELA. Al tiempo del contrato, el investigado, Gerard Piqué Bernabéu, era jugador en activo del FC Barcelona, equipo que participaba en la Supercopa”, señaló la jueza.
se fijó en 4 millones de euros, frente a los 40 correspondientes al pago anual en favor de la RFEF, y todo ello durante seis años. Posteriormente, se amplió el acuerdo por cuatro temporadas más, pactándose igualmente mantener la prima de éxito en favor del comisionista. Ese "tercer agente" se revela en un documento aparte, firmado por Rubiales, Sela y el propio Piqué, que ingresaría 40 millones en diez años por los 400 que recibiría la RFEF.
