El nombre de Ronald Araujo sigue siendo uno de los temas más relevantes en la actualidad del FC Barcelona, generando un intenso debate entre la afición, medios y directiva. La situación del emblemático defensa uruguayo, que en los últimos meses ha sido objeto de múltiples rumores, se ha visto marcada por una serie de movimientos y decisiones que podrían determinar su futuro en el club.
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¿Qué pasa con Araujo?
Desde su llegada al Barcelona, Araujo ha demostrado ser uno de los pilares defensivos del equipo, pese a algunas irregularidades y problemas físicos que han afectado su rendimiento.
No obstante, el interés de otros clubes europeos en ficharle no ha cesado, y en enero de 2024, estuvo muy cerca de marcharse al Bayern de Múnich. La operación, que parecía inminente, fue finalmente descartada por Xavi Hernández debido a las múltiples bajas en defensa y la necesidad urgente de contar con su liderazgo en la zaga azulgrana.
A pesar de que el pasado verano también rondaron rumores sobre su salida, la realidad es que el Barcelona acaba de renovar a Araujo hasta 2031, lo que refuerza su intención de mantenerlo en plantilla.
Deco, director deportivo del cuadro azulgrana ha manifestado en varias ocasiones que apuesta por la continuidad del uruguayo, quien además es uno de los capitanes del club y un referente dentro del vestidor.
10 días para traer ofertas
Sin embargo, su valor de mercado, estimado cerca de 80 millones de euros, sigue situándolo como un jugador transferible, especialmente en un club que necesita recaudar fondos para fortalecer otras áreas. El interés por su figura no solo viene desde el exterior, sino también desde inside, donde dentro del vestuario y del cuerpo técnico existe la duda sobre si será conveniente su continuidad a largo plazo.
La incertidumbre se intensifica con la presencia de un “overbooking” en la posición de central. Con ínigo Martínez, Pau Cubarsí, Andreas Christensen, Eric García, Sergi Domínguez y Jules Koundé, la plantilla barcelonista tiene suficientes opciones, lo que aumenta la posibilidad de que al menos un central abandone el club en busca de minutos y oportunidades.
Aunque el club considera la salida de Christensen como una opción más factible, Eduardo Inda confirmó en El Chiringuito que todavía no se sabe con claridad si Araujo será incluido en esa lista o si se será ofrecido como una posible venta entre el 1 y 10 de julio, con una cláusula de rescisión de 65 millones de euros que solo estará activa durante esa ventana.
El futuro del uruguayo también se ha visto condicionado por su rendimiento en la última temporada, marcada por lesiones y errores que afectaron su confianza. Su participación en solo 25 partidos, junto con algunas fallas notorias en momentos decisivos, ha llevado a que su valoración baje considerablemente en el mercado.
El Barça, sin embargo, mantiene su postura de venderlo por aproximadamente 60 millones de euros, cifra que consideraría favorable para aliviar su economía y avanzar en otros fichajes, como el de Nico Williams.
Por otra parte, Araujo ha mostrado una postura firme en su deseo de seguir en el club, señalando su intención de competir por un puesto. Sin embargo, el club y sus agentes siempre estarán atentos a posibles ofertas que puedan llegar desde el exterior, ya que la tentación de una buena venta aún está presente.