Hablar de problemas en este FC Barcelona parece surrealista, pero los hay... o podría haber, aunque no puedan percibirse a simple vista o mientras el club no profundice en esos caminos que conducen a lo incierto.
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Hay que insistir que un equipo que marcha líder de La Liga con 66 puntos, está en cuartos de final de Champions League y solo un partido les resta de meterse en la final de la Copa de Rey, pudiera no dejar evidencias de problemáticas, pero...¿Y si el problema está en otro foco? Allá vamos para comprenderlo.
Este lunes sorprendió la presencia de Marc-André ter Stegen en una parte del entrenamiento con el resto del grupo, asumiendo notables avances en el proceso de recuperación y mientras todo señala que estará disponible para jugar dentro de un mes, aproximadamente.
Y alguno pudiera preguntarse: ¿Cuál es el problema? Algo válido, pero sin contemplar el nuevo escenario que llegará a la mesa de Hansi Flick, que viene confiando en un plan en su portería con éxitos.
Barcelona: ¿Szczesny o Ter Stegen?
El regreso del alemán supondría, por lo menos, una realidad para remplatear ciertas cosas, aunque sería bajo un estado fuera de ritmo, pero con un Barcelona luchando por distintos títulos.
Ahí es cuando se revisa a la propia Liga de Campeones, si los de Flick se hacen con un hueco en la semifinal, tras superar los cuartos de final frente al Borussia Dortmund. Ocurriría que los culés ya deberían pensar en medirse entre Bayern de Múnich e Inter de Milán, en unas fechas tentativas entre el 29-30 de abril en Montjuïc y la vuelta para el 6-7 de mayo en territorio alemán o italiano.
Pero lo cierto es que Ter Stegen, aunque ya pudiera jugar en La Liga tendría en Champions League un escollo burocráticom difícil de gestionar, al no estar en la lista de jugadores inscritos, en la que figura Iñaki Peña y Szczesny junto a Astralaga, Kochen y Yaakobishvili, pertenecientes de la lista B.
Y es que, cuando la lesión del alemán se produjo, Barcelona utilizó el artículo 31.14 de la UEFA para darle entrada al conocido 'Tek', por lo que un posible regreso a la competición solo se podría ejecutar si el hombre de salida es el mismísmo Szczesny.
Todo esto sí es un problema para Barcelona, que -de avanzar- tendría que decidir si jugarse el título con su capitán -regresando de una lesión- o con su actual guardameta titular, con el que hasta ahora no conocen el trago amargo de la derrota en 18 partidos.