Si hay una animadora comprometida, esa es Adamari López. La puertorriqueña se ha caracterizado por siempre cumplir a cabalidad con sus compromisos profesionales, lo que ha sido un motivo de sobra para recibir tantas oportunidades como las que ha tenido hasta el sol de hoy.
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Actualmente, labora en el programa “Desiguales” de Univisión junto a otras maravillosas mujeres que le dan vida al espacio. Fue allí donde la también actriz se desmoronó al recordar los momentos especiales de su hija Alaïa que se ha perdido debido al trabajo.
Su historia como madre y trabajadora
En la conversación con sus compañeras, Adamari lamentó haberse saltado tantas cosas de su hija. “Yo tenía la ventaja de tener la tarde libre, pero en la mañana, en los horarios que son las actividades de los niños, yo estaba al aire del programa”, dijo.
“La mayoría de las veces quien va es la mamá, a veces el papá iba, si no estaba trabajando. Pero yo casi nunca podía ir”, lamentó la boricua.
Asimismo, la ex de Luis Fonsi admitió haber negociado con las profesoras para que le permitieran poder asistir a los eventos de la niña. “Yo a veces trataba de acordar con las maestras: ‘Hay algunas de esas actividades que se puedan hacer después de las 11 y cuarto de la mañana, para yo poder estar presente’, porque las cosas son temprano”.
Muy conmovida, la conductora relató la vez en la que logró obtener un tiempo en su apretada agenda y así poder asistir a una misa semanal que realizan en el colegio de su hija con Toni Costa, una situación que significó una sorpresa para la pequeña de nueve años.
“Antes de que terminara de trabajar en el programa, nunca había ido (a la misa), y (Alaïa) siempre veía a todos los papás que llegaban y yo no iba. Recuerdo el primer día que fui, ella solamente me miraba, se me acercaba, me tocaba”, contó.
