El Estadio Red Bull Arena de la ciudad de Leipzig fue epicentro de un duelo agónico entre Portugal y República Checa en un duelo por el Grupo F de la Eurocopa. Uno que se decidió en el epílogo del partido, con un agonizante gol de Francisco Conceição, para salvar las aspiraciones lusas y cerrar con ese 2-1.
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De entrada, el compromiso mostró las armas de cada equipo para el cotejo. Sobre todo, con los portugueses intentando llevar los tiempos del partido, mientras Chequia apostaba al orden defensivo y alguna contra sorpresiva.
Sin embargo, en esa primera mitad ambos quedaron a deber en cuanto a fútbol. Principalmente, Portugal que hilvanó muy pocas opciones de anotar, destacando alguna internada de Cristiano Ronaldo y Vitinha.
Portugal en aprietos en el segundo tiempo
La segunda parte parecía que tendría más de lo visto en el primer tiempo. Sin embargo, República Checa sorprendió a propios y extraños con un auténtico golazo del centrocampista Lukáš Provod, al minuto 62'.
El volante necesitó un zurdazo imposible de alcanzar para Diogo Costa, lo que puso a correr a los portugueses, con el miedo de dejar puntos en el debut copero.
A partir de ese momento, los lusos intentaron atropellar a los checos, aunque sin mucho fútbol, solo apegándose a los centros al área rival.
La ráfaga de Portugal
Portugal encontró la vía de la salvación con un regalo de los propios checos al 69', gracias al autogol que firmó el defensa Robin Hranáč, después de que su portero (Jindřich Staněk) se la estrelló en su humanidad.
Sin embargo, la victoria de Portugal no llegó a la pizarra de forma inmediata. Más bien, tuvo que ligar a una serie de situaciones, por ejemplo, como la entrada al campo, al minuto 90' de Francisco Conceição, quien terminaría dándole la victoria a los suyos dos minutos más tarde.