Muchos fanáticos y expertos del beisbol se deben estar preguntando cómo un tipo de 33 años está mostrando un nivel altísimo con su bate. Y es que hasta hace poco meses atrás, Salvador Pérez estaba desplomándose y mostrando esa caída que algunos deportistas de alto rendmiento de cierta edad comienzan a sufrir.
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Sin embargo, el carabobeño no ha seguido esa misma línea con la que cerró la zafra anterior, pues en este 2024 parece que está viviendo una nueva juventud. Dentro de pocos días cumplirá 34 y todo parece indicar que seguirá desafiando al tiempo para que su declive no lo afecte de golpe, sino de manera gradual.
Salvador Pérez y un cambio radical
Previo a la jornada de este lunes, Salvador Pérez lidera la Liga Americana en carreras impulsadas (30), cuenta con uno de los mejores promedios del Joven Circuito (.328), y solo ocho jugadores lo superan en cuanto a la cantidad de jonrones (8). Dicho en otras palabras, está viviendo una etapa rejuvenecida.
Pero eso no queda allí. Hasta la semana pasada contaba con un OPS de 1.000 (mínimo de 20 juegos iniciados), y si chequeamos el último receptor de 33 años o más en vivir un momento similar fue Jorge Posada en la temporada 2007. Entonces, nada es casualidad y Salvy sin duda que está golpeando fuerte la bola.
Al entrar en detalles respecto a su rendimiento vemos varios aspectos interesantes. En lo que va del 2024 tiene una de las tasas de ponches más bajas de la liga (13,4% - 20 ponches); acumula 10 bases por bolas, siendo 28 su cifra más alta en una zafra; la segunda tasa de swing más alta de la Liga Americana (58.9%); y el menor porcentaje de lanzamientos en zona de strike (35.4%), demostrando así cierta moderación.
¿Qué esperar de Salvador Pérez esta temporada?
Las temporadas de beisbol son vistas más como un maratón que como una carrera de velocidad, por lo que a esta campaña 2024 todavía le queda mucha tela por cortar. En ese sentido, tocará ver cómo se desenvuelve Salvador Pérez en los calurosos meses de verano, los cuales siempre le pasan factura por estar tanto tiempo agachado detrás del plato.
Es allí donde el manager Matt Quatraro tendrá un protagonismo importante en el año del venezolano. Y es que será él quien se encargue de darle un manejo cuidadoso a la carga del receptor para garantizarle más frescura, sobre todo si el equipo sigue perfilándose hacia la postemporada.