Tiburones de La Guaira ha sido uno de los equipos con más movimientos en la temporada baja, preparándose para lo que será la zafra 2023-2024 de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. Todo con la intención de redimir lo hecho en la pasada contienda.
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Sin embargo, una problemática empieza a presentarse en el conjunto escualo. Para muchos significa un "buen inconveniente", pero para el cuerpo técnico de los salados podría convertirse en una "incomodidad".
Estamos hablando de la sobrepoblación en la segunda posición del diamante: el receptor. Durante los meses previos a la zafra, la gerencia de los salados se ha encargado de hacer oficial cada una de las firmas acordadas con los respectivos beisbolistas.
Teniendo en cuenta los caretas que vieron acción en la pasada temporada y los que han salido y llegado vía cambios con otros conjuntos, Tiburones estaría contando con un total de ocho receptores, hasta la fecha, los cuales son:
Francisco Arcia, José Briceño, Juan Fernández, Micael Ramírez, Wilson García, Roberto Álvarez, Israel Pineda y Sebastián Rivero
Algunos de ellos podrían ver acción como inicialistas o bateadores designados, lo que aliviaría un poco el asunto. Pero sigue siendo una cantidad abultada de receptores.
Ricardo Genovés fue uno de los que salió del equipo, en una transferencia que significó la llegada de los lanzadores Mayckol Guaipe y Oddanier Mosqueda.
Por su parte, José Briceño se incorporará a las filas de los litoralenses luego de llegar en un canje desde las Águilas del Zulia.
¿Cómo manejará esta situación el mánager Edgardo Alfonzo?