La temporada 2025 de las Grandes Ligas promete ser un espectáculo inolvidable, y dos figuras venezolanas podrían jugar un papel crucial en lograr proezas que queden marcadas en la historia. Ezequiel Tovar y Luis Arráez tienen habilidades únicas que los posicionan como candidatos ideales para desafíos poco comunes, convirtiéndolos en focos de atención en sus respectivos equipos.
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Juego de siete hits
Lograr siete hits en un compromiso es una hazaña que ha sucedido apenas seis veces en la era moderna del beisbol, la última realizada por Brandon Crawford en 2016. Sin embargo, Luis Arráez, de los Padres de San Diego, tiene el perfil perfecto para alcanzar esta meta extraordinaria.
Arráez, conocido por su contacto y evitar poncharse, ha acumulado tres temporadas consecutivas con un promedio de bateo superior a .314 y dos años seguidos con más de 200 hits. Su posición en la parte alta de una alineación poderosa y su capacidad para evitar ponches o boletos lo hacen un fuerte candidato para convertir un juego excepcional en realidad. Aunque depende de factores como entradas adicionales y juegos de alta producción, Arráez tiene el talento necesario para superar este obstáculo histórico.
Triple play sin asistencia
Por otro lado, el joven campocorto de los Rockies de Colorado, Ezequiel Tovar, tiene todo lo necesario para lograr un triple play sin asistencia, un evento aún más raro, registrado solo 15 veces en la historia. Este tipo de jugada exige no solo habilidad, sino también estar en el lugar correcto en el momento oportuno, algo que parece alinearse con Tovar.
El campocorto de 23 años destaca por su velocidad y atletismo, como lo demuestran sus +15 Outs Por Encima del Promedio (OAA) en la temporada pasada. Además, la cantidad de corredores en base y pelotas en juego permitidas por los lanzadores de los Rockies crea el ambiente ideal para que Tovar se luzca con esta proeza. La historia ya conecta a los Rockies con esta hazaña, pues Troy Tulowitzki realizó la tercera más reciente en 2007, también como campocorto del equipo.
