Randy Arozarena conectó un jonrón de tres carreras contra su ex equipo, Bryce Miller permitió dos hits e igualó un récord personal con 10 ponches en siete entradas, y los Marineros de Seattle derrotaron el lunes por la noche 5-1 a los Rays de Tampa Bay.
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El toletero cubano-mexicano fue adquirido de los Rays a fines de julio antes de la fecha límite de cambios con la esperanza de agregarle longitud al orden al bate de Seattle. Después de un comienzo sólido, había tenido problemas últimamente y estaba en una mala racha de 4 de 39 con solo un hit de extrabase y una impulsada en sus 11 juegos anteriores antes del lunes.
Quizás ver a viejos amigos ayudó. Randy pasó un tiempo en el vestuario de los Rays antes del juego poniéndose al día con sus ex compañeros de equipo y el manager de Tampa Bay, Kevin Cash.
Luego del golpe que abrió el juego. Arozarena despachó su cuadrangular número 17 de la temporada en la tercera entrada ante Ryan Pepiot dejó un cutter en la mitad exterior del plato y Arozarena lo condujo hacia el jardín derecho. Fue apenas su segundo jonrón desde que fue traspasado a Seattle y el primero desde el 29 de julio, su tercer juego con los Marineros.
“Algo que nunca voy a hacer es perder la confianza, pero cuando pasa algo así simplemente te aumenta un poco más la confianza”, dijo Arozarena a través de un intérprete al finalizar el encuentro.
Cifras Redondas
Con las tres carreras remolcadas del encuentro de anoche, Randy Arozarena, llegó a 300 impulsadas en su carrera en las Grandes Ligas. El jardinero ha pasado por tres equipos en sus seis años de servicio en el mejor beisbol del mundo. Los Cardenales de San Luis, los Rays de Tampa Bay y su actual novena los Marineros de Seattle.
Con los Cardenales jugó únicamente 19 juegos y alcanzó a impulsar dos carreras, con los Rays llevó al plato 289 rayitas en 568 compromisos y desde su llegada a los Marineros ha podido remolcar nueve carreras en 26 encuentros.