Además de liderar cómodamente el departamento de almohadillas robadas en MLB (55), el dominicano Elly De La Cruz sigue siendo una referencia obligada en el camino de las bases, tanto para su franquicia como para la historia de las Grandes Ligas.
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El dominicano no solo desplegar sus cualidades con el madero con 3 hits en 4 turnos el pasado domingo, sino que exhibió su velocidad en el cuadro con 4 estafadas esa misma noche, logrando esta marca por segunda ocasión en su carrera y primera en lo que va de temporada.
Sin embargo, su actuación estelar no le bastó para que su equipo consiguiera la victoria, puesto que cayeron 2-1 ante Rays de Tampa Bay en un reñido duelo de pitcheo.
Algo único en los últimos 7 años
Desde el año 2017 ningún jugador había logrado robarse 4 bases en un juego, hasta en dos o más encuentros. Pues ese año, el campocorto estadounidense de Nacionales de Washington, Trea Turner, también lograría esta hazaña en dos compromisos.
Sin embargo, para el torpedero de Rojos de Cincinnati el desafío ahora aumenta de dificultad: llegar a 3 juegos de 4 bases robadas. Un hito que no se ve en Las Mayores desde que lo hiciera Rickey Henderson en 1988 con el uniforme de Yankees de Nueva York.