Nadie más, solo un lanzador ha sido capaz de lanzar más de 225 entradas en una temporada de MLB promediando más de 12 ponches por cada nueve entrada (K/9): Randy Johnson. El histórico serpentinero es considerado entre los mejores de todos los tiempos no solo por su capacidad para abanicar bateadores, sino por el dominio que mostró sobre el morrito en sus 22 campañas como jugador activo.
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No le bastó con conseguir esa marca una vez, más bien lo hizo en cuatro oportunidades consecutivas, dejando su nombre en un pedestal que será muy difícil de alcanzar:
- 1999: 244⅓ entradas lanzadas, 12.1 K/9
- 2000: 271⅔ entradas lanzadas, 12.1 K/9
- 2001: 249⅔ entradas lanzadas, 13.4 K/9
- 2002: 248⅔ entradas lanzadas, 12.6 K/9
Un récord de Randy Johnson casi imposible de igualar en la era actual
El promedio de ponches por nueve entradas (K/9) es una estadística que mide la capacidad de un lanzador para retirar a los bateadores por la vía del ponche. Alcanzar un K/9 superior a 12 es una hazaña impresionante, especialmente cuando se mantiene a lo largo de una temporada completa con una carga de trabajo tan significativa como la que tuvo Johnson.
En 2024, Chris Sale, de los Bravos de Atlanta, lideró las mayores con un K/9 de 11.40, acumulando 225 ponches en 177.2 entradas lanzadas. Aunque Sale tuvo una actuación sobresaliente, con la cual ganó el Cy Young de la Liga Nacional y la Triple Corona, no alcanzó las 225 entradas necesarias para igualar la hazaña.
La tendencia en el beisbol moderno ha sido limitar la cantidad de entradas lanzadas por los pitchers abridores, enfocándose más en la efectividad y en la preservación de la salud. Esto ha llevado a una disminución en el número de serpentineros que acumulan altas cifras de entradas en una temporada. Por ejemplo, desde 2016, solo un lanzador ha superado las 225 entradas en una temporada: Sandy Alcántara en 2022, con 228.2 entradas y un K/9 de 8.1.