Theoscar Mogollón González | @Theo_Mogollon
Andrés Giménez había comenzado la presente temporada de Grandes Ligas con una seguidilla de nueve encuentros dando por lo menos un sencillo. Sin embargo, esa racha se cortó a mediados de abril cuando el infielder de los Guardianes de Cleveland comenzó a enfriarse con el bate.
Su promedio era de .350 antes de iniciar la serie contra los Yankees de Nueva York, a los cuales solo le bateó dos sencillos en 12 turnos. Desde entonces, su aporte ofensivo fue cayendo estrepitosamente en los juegos subsiguientes.
Ante los Nacionales de Washington en 11 visitas al plato solo conectó dos dobles; contra los Tigres de Detroit se fue de 9-2; en los dos encuentros contra los Marlins de Miami se fue en blanco en seis turnos; a los Rockies de Colorado le bateó un sencillo y un doble en nueve turnos; mientras que finalizó de 12-3 ante los Medias Rojas de Boston. En total, durante el mes de abril, Giménez bajó a .250 su promedio al bate.
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A su vez, el mes de mayo tampoco ha sido diferente para el venezolano. En la serie que iniciaron ante los Yankees nuevamente, el infielder solo conectó un sencillo en 11 turnos; contra los Mellizos de Minnesota se fue en blanco en 9 turnos; mientras que contra los Tigres terminó de 7-1, lo que obligó al manager Terry Francona a dejarlo fuera de la alineación el día de ayer.
Hasta la fecha, Andrés Giménez batea para .214 de promedio, con 27 hits en 127 turnos al bate, 8 carreras impulsadas y 6 bases robadas.