Frederlin Castro
Tal vez sea seguro decir que los fanáticos de los Astros de Houston ya se olvidaron de su antiguo shortstop estrella Carlos Correa. El hombre cumplió en el terreno e hizo un buen trabajo tanto ofensivo como defensivo, pero ahora hay pelotero más joven que llena el vacío y ese es Jeremy Peña.
Hablan los números
Peña, de 25 años, es un novato, pero tiene mucho a su favor. No sólo es campeón de la Serie Mundial, sino que también es el MVP de la ALCS, el MVP de la Serie Mundial y tiene un Guante de Oro. Además, ha conseguido un 4.8 WAR y ha bateado 22 jonrones durante la temporada regular. En definitiva, su futuro es muy prometedor.
Correa registró estadísticas extrañamente similares a las de Peña en su año de novato como Astro en 2015. Su WAR estuvo en un idéntico 4.8 y además conectó 22 jonrones.
Peña está entre un grupo de jóvenes jugadores de los Astros que están llevando al equipo a la nueva década. Se une a Framber Valdez, Yordan Álvarez y Kyle Tucker para demostrar a todo el mundo que no necesitan depender de veteranos como Yuli Gurriel y Justin Verlander para ganar partidos.
Lo que vendrá
Muchos asumieron que perder a Correa marcaría un descenso en el equipo de los Astros de Houston para la posición de shortstop. En siete temporadas, después de todo, tuvo un muy respetable .277/.356/.481 con 133 jonrones. Terminó teniendo un año muy sólido con Minnesota.
El techo de Jeremy Peña es muy alto. Demostró ser capaz de rendir cuando la pelota está caliente y ganar juegos importantes, por lo que podría estar buscando una extensión de contrato considerable. A medida que su papel se consolida con él en una alineación tan profunda, sus números en la temporada regular podrían subir aún más.