Harold Capote Fernández
Este 21 de febrero es un nuevo aniversario del nacimiento de Óscar Azócar, quien en 1965 llegó al mundo en la localidad costera de Soro en el estado Sucre. Este zurdo guarda un lugar especial en la expedición venezolana en las Grandes Ligas, por ser el primero que arribó al máximo nivel con el uniforme de los Yanquis de Nueva York.
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En su debut, el zurdo Óscar Gregorio llegó al Yankee Stadium para disputar el duelo de los Mulos ante los Reales de Kansas City. Salió como bateador emergente por su paisano Álvaro Espinoza, y logró conectar imparable al jardín izquierdo ante los envíos de Steve Farr.
Ese día la visita se impuso 10x7.
Por otra parte, el 25 de julio de ese año, vivió el que quizás fue su mejor partido en el Big Show. Ese miércoles por la noche se fue de 4-2 ante el legendario Nolan Ryan, despachando sencillo y robándose una base en el primero, además de doble en el séptimo.
El camino iniciado por él como debutante criollo en la gran carpa con el legendario uniforme a rayas, fue seguido por Juan Rivera (2001), pasando también Dióner Navarro (2004), Alberto González (2007), Francisco Cervelli (2008), Jesús Montero (2011), Yangervis Solarte (2014), José Pirela (2014), Ramón Flores (2015), Diego Moreno (2015), Ronald Herrera (2017), Gléyber Torres (2018), Thairo Estrada (2019) y Miguel Yajure (2020).
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En la Gran Carpa, igualmente jugó para los Padres de San Diego en 1991 y 1992.
Óscar Azócar en la LVBP
Su carrera en el circuito local es una de las más peculiares que se hayan podido apreciar. Comenzó desde muy temprano, a sus 18 años, como lanzador de los Leones del Caracas en la temporada 1983/1984.
Con los melenudos vivió cuatro años muy buenos como serpentinero a tiempo completo, dejando efectividades de 1.29 en 14 entradas, 3.09 en 46.2; 2.91 en 74.1 y 3.74 en 67.1.
No obstante, su habilidad con el madero era muy notoria, difícil de desperdiciar, por eso a partir del torneo 1987/1988 se dedica en definitiva al rol de toletero, jugando principalmente en los jardines y la inicial.
Su aporte, primero en el montículo y luego en la caja de bateo, muy importante fue en las titulaciones caraquistas de 1987, 1988 y 1990. Por espacio de 6 torneos fue un bateador muy solvente que como León dejó .270 de average, con 10 jonrones, 56 dobles, 14 triples, 15 bases robadas, 132 empujadas y 111 anotadas.
Concluida su etaapa con el Caracas, a partir del campeonato 1993/1994 es enviado a los Caribes de Oriente, quienes poco después de la mitad de ese torneo, lo canjearon a los Navegantes del Magallanes por la ficha del recio toletero, William Magallanes.
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Ese sería un cambio decisivo en la eventual primera final de los Eternos Rivales, pues con su cuadrangular en el séptimo capítulo del séptimo juego, Azócar daba ventaja definitiva de 10x3 a los turcos, que alzaban su primer título en 15 años y de paso, ante los Leones.
El oriental, también tuvo un exitoso periplo con los Tigres de Aragua, ligando para .302 en 4 campañas, misma cantidad que disputó con los Tiburones de La Guaira hasta la edición 2002/2003, la que significó su capítulo final en la LVBP.
En ocasión de la Serie del Caribe realizada en febrero del 2010, en la isla de Margarita, el recordado zurdo fue exaltado al Salón de la Fama del Caribe.