Tras un arranque inmejorable en la Súper Ronda, ganando dos juegos en fila en condición de local, Guaiqueríes de Margarita se prepara para afrontar su tercer compromiso en esta instancia decisiva de la de la Superliga Profesional de Baloncesto (SPB).
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Dicha prueba será su primera fuera de casa, específicamente en el Forum de Valencia ante Trotamundos de Carabobo, el próximo miércoles 21 de agosto.
Ante este positivo arranque, que sirve de impulso, el coach del conjunto insular, Yonaiker Eker, hace honores a la popular frase de la recordada leyenda de la NBA, Kobe Bryant: "el trabajo no ha terminado".
Dos tareas completadas y seis pendientes
"Venimos haciendo un gran trabajo desde el enfoque, la planificación de los partidos, la construcción del equipo y se ha notado. Pero en la Súper Ronda no hay rival pequeño, los cuatro equipos son muy duros", afirmó Eker.
Asimismo, el estratega guaiquerí aseguró que cada juego restante es una final por disputar: "En estos 6 juegos no podemos bajar los brazos, cada partido es una guerra y debemos ser intensos".
"El principal rival somos nosotros mismos, hay juegos de un día de por medio y debemos adaptarnos a eso. Comenzar con dos victorias en casa no nos dice mucho, hay que pasar la página de inmediato", sentenció el actual cacique de la tribu.
Cabe destacar que desde que asumió el mando del conjunto aborigen, el pasado 14 de junio, posee récord de 14-1.
Profundidad: La clave del éxito
Tal y como mencionaba anteriormente el entrenador criollo, la gestión de cada pieza ha sido vital en función de brindarle profundidad en el banquillo, un factor que hace de Guaiqueríes un equipo recursivo.
"Para este torneo es fundamental tener una rotación tan larga como la nuestra, todos han hecho su trabajo, han estado a disposición y eso es bastante meritorio", explicó Eker.
Apoyado en esta cualidad, el mandamás del equipo margariteño aplica tres valores claves en su filosofía de juego: enfoque, intensidad y humildad. El primero para entender qué hacer, el segundo para no bajar el ritmo y el tercero para comprender el rol de cada jugador dentro y fuera de la cancha.
"En esta instancia no se puede negociar nada, no podemos jugar viendo el score, sino cuando suene la chicharra. Cada punto cuenta tanto en ataque como en defensa, por eso hay que estar concentrados en la toma de decisiones al finalizar los partidos", detalló el coach.