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El Papa Francisco ha sido hospitalizado en Roma debido a una bronquitis diagnosticada el pasado jueves, lo que ha generado preocupación en la comunidad católica. A pesar de su condición, el Pontífice continuó con sus actividades diarias, pero delegó algunos discursos debido a dificultades para respirar.
El Vaticano confirmó que el Papa está siendo ingresado al Policlínico Gemelli, donde se someterá a pruebas médicas para evaluar el estado de su salud. El Papa Francisco, de 88 años, tiene antecedentes médicos delicados, ya que le extirparon un pulmón en su juventud, esto lo hace vulnerable a problemas respiratorios, especialmente durante el invierno.
A lo largo de su vida, ha padecido episodios recurrentes de bronquitis aguda, que han empeorado en los últimos años. La bronquitis actual es una de las últimas amenazas a su salud, que ha afectado su capacidad para realizar algunas actividades cotidianas.
El Vaticano informó en Instagram que el Papa Francisco fue ingresado en el Policlínico Gemelli de Roma, un centro donde ya fue tratado en varias ocasiones. Recordemos que el Pontífice fue sometido a una cirugía en 2023 para reparar una hernia y extirpar tejido cicatricial intestinal. Además, en ocasiones anteriores, el hospital ha sido el lugar donde se le administraron antibióticos intravenosos debido a infecciones respiratorias.
Desde que comenzó el tratamiento para la bronquitis, el Papa Francisco ha mostrado signos de hinchazón, lo que sugiere que la medicación podría estar causándole retención de líquidos. Este efecto secundario ha aumentado la preocupación sobre su estado de salud, ya que puede complicar aún más su recuperación.
Durante los días previos a su hospitalización, presidió audiencias y celebró una misa al aire libre, aunque delegó parte de sus funciones debido a las dificultades respiratorias, esto demuestra su dedicación a sus deberes, a pesar de las complicaciones que enfrenta.