Helene, que hasta ahora era una tormenta tropical, ha escalado en su fuerza hasta convertirse en huracán durante la mañana de este miércoles. Se espera que impacte la costa del Golfo de Florida para finales de esta semana, ubicándose el fenómeno en la categoría 3.
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El Centro Nacional de Huracanes hizo una nueva actualización sobre Helene y en ella informó que tiene vientos máximos sostenidos de unos 80 mph y que se desplaza a unos 10 mph en dirección norte-noroeste. En ese sentido, la tormenta se encuentra a unas 500 millas sur-suroeste de Tampa, por lo que se esperan marejadas, fuertes vientos y lluvias torrenciales en la costa de Florida y el sureste de Estados Unidos.
Helene se convertirá en un gran huracán
Hasta los momentos, se espera que Helene se fortalezca rápidamente sobre el este del Golfo de México para convertirse en un gran huracán para el día jueves. Según las informaciones meteorológicas, en estos momentos Helene se encuentra en el área de Big Bend en la costa del Golfo de Florida, una de las regiones menos pobladas de la costa.
Los vientos huracanados se mantienen por debajo de las 115 millas por hora y causarán daños considerables en las zonas cercanas al ojo del huracán. Incluso, cerca del ojo del huracán las marejadas ciclónicas podrían alcanzar los 15 pies. Mientras que en Tampa se esperan marejadas de máximo 8 pies.
Otras consecuencias de Helene
El Centro Nacional de Huracanes prevé que Helene provoque acumulaciones totales de lluvia que van desde las 5 hasta las 10 pulgadas en el sureste de Estados Unidos, con unos totales de hasta 15 pulgadas. Las lluvias pueden ocasionar inundaciones repentinas e importantes en algunas zonas urbanas.
También se ha informado a la población que se esperan algunos deslizamientos de tierra en zonas de terreno escarpado hacia el sur de los Apalaches. Las inundaciones repentinas en zonas urbanas también están contempladas entre las posibles consecuencias de Helene a su paso por Florida.