El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se dirigió a la nación este miércoles por la noche para dar sus primeras declaraciones con respecto al reciente atentado en el Barrio Francés de Nueva Orleans. En su discurso, Biden enfatizó que "nadie debería apresurarse a sacar conclusiones" y subrayó la importancia de una investigación exhaustiva y meticulosa.
NOTAS RELACIONADAS
Biden informó que ha ordenado a los principales funcionarios encargados de hacer cumplir la ley que continúen investigando "intensivamente" el ataque. "La comunidad de aplicación de la ley e inteligencia continúa buscando cualquier conexión, asociación o cómplices. No tenemos nada adicional que informar en este momento. La investigación sigue siendo activa y nadie debería apresurarse a sacar conclusiones", declaró el presidente.
Los hechos en Nueva Orléans
El ataque, que ocurrió este miércoles, dejó al menos 15 personas muertas y decenas de heridos cuando un sospechoso embistió su camioneta contra una multitud. La investigación del FBI está en curso y los investigadores están tratando de determinar si otras personas pudieron haber estado involucradas además del sospechoso.
"He dirigido a mi secretario de Justicia, al director del FBI, al secretario de Seguridad Nacional, al jefe del Centro Nacional de Contrainteligencia y Terrorismo, y a la comunidad de inteligencia a trabajar en esto intensamente hasta que tengamos una información completa. Y una vez que tengamos esa información, la compartiré tan pronto como podamos confirmarla", agregó Biden.
Recursos disponibles para la investigación
El presidente también aseguró que ha dirigido a su equipo para que todos los recursos estén disponibles para las fuerzas del orden federales, estatales y locales, con el fin de completar la investigación en Nueva Orleans rápidamente y garantizar que no haya ninguna amenaza restante para el pueblo estadounidense.
En su discurso, Biden expresó su solidaridad con las víctimas y sus familias, y reiteró su compromiso de llevar a los responsables ante la justicia. "No hay justificación para la violencia de ningún tipo y no toleraremos ningún ataque a ninguna de las comunidades de nuestra nación", concluyó el presidente.