La tarde del pasado martes se tornó violenta para un oficial del Departamento de Policía de Denver, luego de que un hombre, identificado como Tyron Brooks, de 48 años, lo atacara durante un arresto.
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El incidente comenzó con una llamada por una disputa doméstica en un callejón detrás de un restaurante en University Boulevard. Al llegar al lugar, los oficiales encontraron a Brooks en un estado alterado, gritando y con una actitud agresiva.
Los oficiales intentaron hablar con él y disuadirlo de que dejara a una mujer que se encontraba sentada en el suelo, visiblemente atemorizada. Sin embargo, Brooks se negó y, cuando los agentes le preguntaron a la mujer si necesitaba ayuda, él le cubrió la boca.
Ante el peligro que corría la mujer, los oficiales decidieron intervenir y arrestar a Brooks. Tras forcejear, lograron ponerlo boca abajo, pero Brooks se resistió con tal fuerza que logró voltearse y mordió con saña el dedo anular de uno de los oficiales, arrancándole la parte superior.
A pesar de la brutalidad del ataque, la mujer no presentó cargos contra Brooks. Sin embargo, fue detenido por agresión en segundo grado a un oficial de policía, un delito grave. Además, tenía dos órdenes de arresto pendientes por extorsión y obstrucción a la justicia.