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Una ola de calor sin precedentes ha impactado a Estados Unidos, estableciendo récords de temperatura y causando serias consecuencias en diversas regiones. En el oeste, las temperaturas peligrosamente altas han resultado mortales, mientras que el este sufre con un calor y humedad opresivos. El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido advertencias de calor excesivo para unos 36 millones de personas, lo que representa el 10% de la población del país.
En el Valle de la Muerte, California, las temperaturas alcanzaron un increíble máximo de 54°C. Este calor extremo resultó en la muerte de un motociclista por exposición al calor, y otro miembro de su grupo fue hospitalizado con una grave enfermedad relacionada con el calor. Las autoridades han subrayado los peligros de realizar actividades al aire libre bajo estas condiciones extremas y han pedido a los visitantes que tomen precauciones adicionales.
Phoenix, Arizona, ha sido otra ciudad gravemente afectada, estableciendo un nuevo récord de temperatura mínima más cálida, con temperaturas que no bajaron de 33,3°C. La ciudad ha soportado temperaturas superiores a 43°C durante cinco días consecutivos, y se espera que esta racha continúe.
El este de Estados Unidos tampoco ha sido inmune a esta ola de calor. Aunque las temperaturas no han alcanzado los niveles extremos del oeste, la combinación de calor y humedad ha creado condiciones sofocantes. Las autoridades han emitido advertencias instando a las personas a mantenerse hidratadas y a buscar refugio en lugares con aire acondicionado. Las temperaturas superiores a 38°C han sido comunes, y aunque no se han emitido avisos de calor excesivo en algunas áreas, el riesgo sigue siendo alto.
Las infraestructuras y el transporte también han sido afectados por esta ola de calor. En Las Vegas, las temperaturas alcanzaron un récord de 49°C, lo que llevó al Servicio Meteorológico Nacional a compartir imágenes de galletas cocinándose en un coche y lápices de colores derritiéndose. Las altas temperaturas han causado la cancelación de más de 1,000 vuelos en los aeropuertos de la región, afectando a miles de viajeros.
