George Álvarez ha sido sentenciado a 60 años de prisión tras ser encontrado culpable de homicidio por intoxicación, luego de causar la muerte de ocho venezolanos el 7 de mayo de 2023 en Brownsville, Texas.
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Esta tragedia ocurrió cuando Álvarez, al volante de una SUV, atropelló a una multitud en una parada de autobús cerca de un refugio para migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México.
Accidente fatal
El día del incidente, Álvarez pasó un semáforo en rojo, perdió el control de su vehículo y volcó, atropellando a 18 personas. Seis murieron en el lugar, mientras que dos fallecieron posteriormente en el hospital.
Doce personas resultaron gravemente heridas. Las víctimas eran en su mayoría migrantes venezolanos que esperaban el autobús para regresar al centro de la ciudad después de pasar la noche en el refugio.
La comunidad de Brownsville, un área clave en la migración, quedó profundamente afectada por este trágico evento. Los testigos detuvieron a Álvarez cuando intentaba huir de la escena, asegurando su arresto.
Desarrollo del juicio
El juicio de Álvarez duró una semana, durante la cual fue declarado culpable de ocho cargos de homicidio por intoxicación y diez cargos de agresión agravada con un arma letal. Durante el juicio, Álvarez expresó su arrepentimiento, disculpándose con las familias afectadas y revelando su larga lucha contra la adicción a las drogas, la cual había comenzado a los 11 años. Admitió que su adicción a la cocaína había sido un factor en el accidente.
El fiscal de distrito del condado de Cameron, Luis Sáenz, expresó su satisfacción con el veredicto, aunque lamentó profundamente las vidas perdidas y las familias destrozadas por este incidente. “Ocho personas siguen fallecidas y 10 han cambiado sus vidas para siempre. Pero estoy satisfecho con cómo resultaron las cosas”, comentó Sáenz.
Por otro lado, la defensa de Álvarez argumentó que no estaba bajo la influencia de drogas al momento del accidente, señalando que solo se encontraron rastros de sustancias en su sistema. Sin embargo, los jurados, después de deliberar, decidieron que la evidencia apuntaba a que Álvarez estaba ebrio durante el incidente. Ashley Flores, una de las jurados, destacó la dificultad de la decisión, pero enfatizó que creyeron en la culpabilidad de Álvarez basada en las pruebas presentadas.