El receptor estelar de los Tampa Bay Buccaneers, Mike Evans, ha igualado una de las marcas más emblemáticas de la NFL al registrar su undécima temporada consecutiva con al menos 1,000 yardas por recepción, empatando así con el legendario Jerry Rice.
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Evans alcanzó este hito durante la victoria de los Buccaneers por 27-19 sobre los New Orleans Saints.
Con menos de un minuto en el reloj, el mariscal de campo Baker Mayfield conectó un pase corto de nueve yardas con Evans, quien necesitaba solo cinco yardas más para superar la marca de las 1,000 en la temporada.
Esta recepción no solo le permitió igualar el récord de Rice, sino que también le aseguró un bono de incentivo de $3 millones de dólares estipulado en su contrato.
El receptor celebró efusivamente en el campo, siendo felicitado por sus compañeros mientras la afición en el Raymond James Stadium estallaba en vítores.
A pesar de haberse perdido tres juegos esta temporada debido a una lesión en el tendón de la corva, Evans demostró su consistencia y habilidad al finalizar la campaña regular con 1,004 yardas en 65 recepciones. Este logro es aún más impresionante considerando las adversidades físicas que enfrentó a lo largo del año.
Con esta victoria, los Buccaneers aseguraron el título de la NFC Sur y su quinta aparición consecutiva en los playoffs, consolidándose como una de las franquicias más consistentes de la liga en los últimos años.
El entrenador en jefe, Todd Bowles, enfatizó la importancia de este triunfo, ya que una victoria era necesaria para asegurar su lugar en la postemporada.
Mike Evans, quien ha sido una pieza fundamental para la ofensiva de Tampa Bay desde su llegada a la liga, continúa cimentando su legado como uno de los mejores receptores de su generación, ahora compartiendo un récord histórico con el incomparable Jerry Rice