En un movimiento inesperado pero estratégico, Ezekiel Elliott, el exestrella de los Dallas Cowboys, se convirtió este lunes en el nuevo corredor de los Los Angeles Chargers.
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La incorporación llega justo a tiempo para el inicio de los playoffs de la temporada 2024 de la NFL, con un debut programado para este sábado cuando los Chargers enfrenten a los Houston Texans en la ronda de comodines de la Conferencia Americana (AFC).
Elliott, de 29 años, fue liberado la semana pasada por el equipo de la estrella solitaria, una decisión que el propietario de los Cowboys, Jerry Jones, explicó como un gesto de respeto y aprecio hacia el corredor.
"Por respeto y aprecio hacia Zeke y con el deseo de brindarle la oportunidad de participar en los playoffs, lo liberamos de la plantilla de los Cowboys", declaró Jones.
La llegada de Elliott a los Chargers busca reforzar un ataque terrestre que terminó la temporada regular en el puesto 17 entre los 32 equipos de la liga, con un promedio de 110.7 yardas por partido y un total de 1,882 yardas acumuladas.
La necesidad de un impulso en el juego por tierra es urgente debido a las lesiones que han afectado a los principales corredores del equipo. JK Dobbins, recién recuperado de un esguince de rodilla, y Gus Edwards, ausente en los últimos dos partidos por una lesión en el tobillo, han limitado las opciones del entrenador Jim Harbaugh.
Los Chargers, que ocuparon la quinta posición en la AFC, buscarán avanzar en la postemporada enfrentando a unos Texans que finalizaron como campeones de la División Sur de la conferencia.
Elliott aportará no solo su talento, sino también su experiencia como uno de los mejores corredores de la NFL.
Desde su llegada a la liga como selección de primera ronda en el Draft de 2016, Zeke acumuló 8,488 yardas con los Cowboys, colocándose como el tercer mejor corredor en la historia de la franquicia, solo superado por las leyendas Emmitt Smith y Tony Dorsett.