El misterio que rodeaba la muerte de Gene Hackman ha sido esclarecido por el médico forense del condado de Santa Fe, Nuevo México. El reconocido actor, de 95 años, falleció debido a un fallo cardiaco, solo días después de la muerte de su esposa, Betsy Arakawa, quien tenía 65 años y sucumbió a una infección mortal por hantavirus.
La conexión entre las muertes
Las autoridades han indicado que el alzhéimer, enfermedad que padecía Hackman, pudo haber influido en su estado mental al no darse cuenta de que su esposa había fallecido en su hogar. Ambos cuerpos fueron encontrados el 26 de febrero, aunque se sospecha que las muertes ocurrieron varios días antes.
El sheriff del condado, Adam Mendoza, informó que la última comunicación de Arakawa fue el 11 de febrero, cuando salió de casa para realizar algunas compras. Por su parte, el marcapasos de Hackman registró su última actividad el 18 de febrero, lo que lleva a las autoridades a creer que fue esa la fecha de su fallecimiento.
Un enigma sin resolver: el perro fallecido
Un aspecto intrigante de la investigación es la muerte de uno de los tres perros que vivían con la pareja. Se trataba de un kelpie australiano, encontrado junto a Arakawa. A pesar de las especulaciones iniciales sobre su raza, la veterinaria Erin Phipps confirmó que los perros no pueden contagiarse del hantavirus. Las autoridades están a la espera de los resultados de la necropsia del animal para esclarecer su muerte.
Escena del hallazgo y condiciones de los cuerpos
El cuerpo de Hackman fue encontrado en una antesala, vestido con un chándal gris y pantuflas, junto a un bastón y unas gafas de sol. En contraste, Arakawa fue hallada en un baño, en el suelo junto a una encimera y un calentador cerca de su cabeza. Las circunstancias de su muerte generaron especulaciones, especialmente por la presencia de un bote abierto con medicamentos para la tiroides y analgésicos comunes.
Investigación sin indicios de criminalidad
El sheriff Mendoza aseguró el 28 de enero que no había señales de actividad criminal en la vivienda. Los cuerpos no presentaban heridas ni lesiones, y se descartó una intoxicación por monóxido de carbono tras revisiones realizadas por bomberos y servicios públicos. La investigación permanecerá abierta hasta que se obtengan los registros completos sobre los móviles del matrimonio.
