Adele pone fin a un capítulo más en su carrera musical, luego de dar por terminada su residencia “Weekends with Adele” en la ciudad de Las Vegas luego de dos años de presentaciones icónicas.
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El Colosseum Theatre de Caesars Palace fue el escenario donde la cantante británica, de 36 años, se despidió de todos sus fanáticos en un anoche mágica con su concierto número 100. Entre lágrimas y un profundo sentimiento de nostalgia agradeciendo a su hijo Angelo, de 14 años y su actual pareja Rich Paul.
En su discurso de despedida, Adele se sinceró sobre el por qué optó por ser residente. “Elegí hacer una residencia principalmente porque odio estar de gira”, declaró la cantante. “Quería mantener su vida normal, y lo logré”, agregó.
Con una gran trayectoria en la industria y un sinfín de éxitos como “Hello”, “Someone Like You” y “Easy on Me” logró posicionar su nombre entre los artistas más destacado de estas últimas dos décadas; es así como acumuló una gran base de fanáticos alrededor del mundo.
En este sentido, la intérprete abrió su corazón sobre su futuro luego de terminar sus presentaciones en Las Vegas. "Los echaré muchísimo de menos. No sé cuándo volveré a actuar. No estoy haciendo nada más, me estoy cag*ndo de miedo pensando en lo que voy a hacer", indicó.
Emociones a flor de piel
Con sus conciertos en el Colosseum Theatre de Caesars Palace, Adele recibió la grata visita de Céline Dion en uno de sus tantos shows hace un par de semanas. El momento quedó grabado y no tardó en hacerse viral en las redes sociales.
“Lloré durante toda una semana”, dijo. la cantante destacó que siempre había deseado actuar en el mismo teatro donde la canadiense había hecho historia con su propia residencia.