Olivier Giroud, internacional en 133 ocasiones con la selección francesa, con la que ha marcado 57 goles, afronta su última gran competición con el equipo nacional en la Eurocopa 2024 y tiene aún en el "fondo" de su "mente" la final del torneo perdida en 2016 contra Portugal.
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Emocionado por el apoyo de los aficionados franceses, ante su próxima despedida, tiene el objetivo de hacer el "mejor torneo posible" a nivel colectivo en Alemania 2024. Siempre prima el grupo por encima de lo individual para el goleador: "Sea cuál sea mi papel, daré lo mejor de mí y espero disfrutar de cada momento".
En la rueda de prensa de este viernes desde la concentración francesa en Paderborn, en Alemania, expresó su "sueño" de ganar la Eurocopa 2024. "Hay muchas expectativas", remarcó.
Y mira hacia atrás, a su recorrido con la selección que empezó el 11 de noviembre de 2011 con una victoria por 1-0 contra Estados Unidos, cuando entró al campo en el minuto 59.
Cuando se retiré sentirá "la nostalgia", "muchos recuerdos" que se quedarán con él para siempre.
"Tengo que disfrutar de cada momento", insistió el atacante, que remarca entre sus recuerdos formar parte del título del Mundial 2018 logrado en Rusia y "ver el orgullo" en los ojos de sus "seres queridos", además del cariño que le han demostrado todos sus compatriotas.
"Mis mejores torneos fueron en 2016 y 2022, porque fui decisivo", proclamó Giroud, autor de dos goles y dos asistencias en la Eurocopa 2016 jugada en Francia, con su equipo como subcampeón, y de cuatro tantos en el Mundial 2022 en Catar, donde su conjunto también fue finalista, derrotado en la tanda de penaltis por Argentina.
A sus 37 años, a las puertas de su cuarta Eurocopa, el delantero asume "un poco este papel de hermano mayor o de papá" en la selección, por los años de diferencia con los más jóvenes de sus compañeros en el equipo galo. "Siempre trato de ser yo mismo, hablar mucho, estar presente. A Barcola no lo conocía antes de venir a la selección y hablé con él, le hice preguntas sobre él, su familia, cómo se sentía en París", repasó.