En una temporada que ya se perfila como histórica, Shohei Ohtani, la superestrella de los Dodgers de Los Ángeles, sigue deslumbrando a todos con su impresionante desempeño tanto en el bateo como en el robo de bases. Con 37 jonrones y 33 robos hasta la fecha, Ohtani se ha consolidado como uno de los jugadores más completos y versátiles de la MLB y persigue su segundo MVP consecutivo.
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ni conectó su jonrón número 37 de la temporada en el encuentro contra los Cerveceros de Milwaukee. Este logro no solo refuerza su poder en el plato, sino que también lo coloca en una élite de jugadores que han alcanzado al menos 30 jonrones y 30 robos en una sola temporada. Este hito lo convierte en el 18º jugador en la historia de la MLB en lograr esta hazaña.
Desde su llegada a los Dodgers con un contrato de 10 años y 700 millones de dólares, Ohtani ha demostrado ser una inversión valiosa. Su capacidad para impactar el juego tanto ofensiva como defensivamente ha sido crucial para el éxito del equipo. Los Dodgers, con un récord de 70-49, están en una posición sólida para los playoffs, y gran parte de este éxito se debe a las contribuciones de Ohtani.
El bambinazo del nipón se produjo en la tercera entrada, con las bases limpias, castigó un lanzamiento en splitter de Colín Rea por todo el jardín derecho para ampliar la ventaja de los Dodgers 2 a 0.
Además de sus 37 jonrones y 33 robos, Shohei Ohtani mantiene un promedio de bateo de .298 y un OPS de 1.007. Estas estadísticas no solo destacan su habilidad para conectar la pelota, sino también su capacidad para generar carreras y mantener una presencia constante en las bases. Su desempeño lo coloca como un fuerte candidato para el premio MVP de la Liga Nacional, lo que lo convertiría en uno de los pocos jugadores en ganar el MVP en ambas ligas, uniéndose a la leyenda Frank Robinson.