Este miércoles, el lanzador mexicano Julio Urías, quien inició como el as de la rotación de los Dodgers de Los Ángeles en la temporada 2023 de la Gran Carpa, recibió una lamentable noticia que tiene que ver con su permanencia en el conjunto azul. El manager de la organización angelina, Dave Roberts, le confirmó al NY Post que, independientemente de lo que suceda con el caso de violencia doméstica en el que está involucrado el zurdo, no hay forma de que regrese al equipo en la presente campaña.
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"El Culichi" no juega con "los Blues" desde hace más de un mes, luego de que fuera detenido saliendo del BMO Stadium de Los Ángeles, en donde se llevó a cabo el partido de MLS entre el Inter Miami y LAFC. El motivo de su arresto fue por una denuncia que alegaba que había maltratado a una mujer en las adyacencias del recinto deportivo.
Ingresó a la cárcel a las 11 de la noche de un día domingo 3 de septiembre y salió en la madrugada del lunes al pagar una fianza de cincuenta mil dólares.
Desde ese incidente, el serpentinero mexicano no ha podido volver a asistir a una concentración con su escuadra de las Mayores ni mantener ninguna relación con la liga al ser agregado en la lista restringida hasta que se esclarezcan los hechos.
A finales del noveno mes del año, concretamente el día 27, se efectuó la primera audiencia de Urías en la Corte de Los Ángeles. Para sorpresa de los presentes, el acusado no asistió, excusándose con que no existían suficientes cargos en su contra para demostrar que había arremetido físicamente en contra de su pareja.
El sinaloense de 27 años termina contrato al finalizar el año en curso y explorará la agencia libre tras la negativa de Roberts de renovarlo. Si logra salir ileso de sus inconvenientes legales, es un hecho que recibirá una gran cantidad de ofertas por parte de varias franquicias de la mejor liga del mundo de beisbol.
En 2022 fue uno de los tres lanzadores favoritos para levantar el premio Cy Young de la Liga Nacional al presumir de un récord de 17-7, 2.16 de efectividad y 0.98 de WHIP con 166 ponches en un total de 175.0 entradas de labor. En contraste, en la actual zafra, siendo el número uno del cuerpo de abridores de los Dodgers, acumuló un PCL de 4.60 y 1.16 de WHIP en 117.1 innings.