Ser fanático de los deportes en Kansas City es una experiencia única, especialmente cuando tienes a la superestrella de los Chiefs, Patrick Mahomes, animando a tu equipo en los playoffs. El miércoles por la noche, durante el tercer juego de la Serie Divisional de la Liga Americana contra los Yankees, Mahomes fue visto celebrando efusivamente en una suite del Kauffman Stadium.
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En la quinta entrada, Michael Massey de los Reales conectó un triple impulsor que empató el juego 2-2, desatando la euforia en el estadio. Entre los fanáticos más emocionados estaba Mahomes, quien saltaba de alegría y se dirigía hacia su excompañero de equipo, Gehrig Dieter, un fanático acérrimo de los Yankees. Este momento capturó la esencia de ser un fanático en Kansas City: la pasión y el apoyo incondicional a los equipos locales.
Mahomes y su Conexión con el Beisbol
Patrick Mahomes no es ajeno al beisbol. Su padre, Pat Mahomes, fue lanzador en las Grandes Ligas durante 11 años, y Patrick mismo fue un destacado jugador de beisbol en su juventud. Participó en la Serie Mundial de la Liga Junior en 2010 y fue una estrella en la escuela secundaria, lanzando un juego sin hits con 16 ponches en un partido de playoffs.
A pesar del entusiasmo y el apoyo de Mahomes, los Yankees se llevaron la victoria 3-2, tomando una ventaja de 2-1 en la serie. El cuarto juego está programado para el jueves por la noche en el Kauffman Stadium, y los fanáticos de Kansas City esperan con ansias ver si los Reales pueden igualar la serie.
La presencia de Patrick Mahomes en el estadio no solo muestra su amor por Kansas City, sino también su conexión personal con el beisbol. Aunque los Reales no lograron ganar el juego, la energía y el entusiasmo de los fanáticos, liderados por Mahomes, demuestran por qué Kansas City es una ciudad apasionada por sus deportes.