Roberto Clemente Walker, nacido en Carolina, Puerto Rico, el 18 de agosto de 1934, fue un jugador de béisbol profesional que se convirtió en un ícono del deporte y un héroe nacional. Su carrera en las Grandes Ligas (MLB) estuvo marcada por su talento excepcional, su dedicación y su espíritu filantrópico.
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Una carrera estelar en las Grandes Ligas:
Clemente jugó toda su carrera de 18 temporadas con los Pittsburgh Pirates, desde su debut en 1955 hasta su trágica muerte en un accidente aéreo en 1972. Durante ese tiempo, se consolidó como uno de los mejores jardineros derechos de la historia, ganando 12 Guantes de Oro consecutivos (1961-1972), empatado con Willie Mays en la mayor cantidad otorgada a un jardinero.
Un bateador excepcional:
Además de su destreza defensiva, Clemente fue un bateador excepcional. Conectó 3.000 hits en su carrera, un logro alcanzado solo por 300 jugadores en la historia de la MLB. También ganó cuatro títulos de bateo de la Liga Nacional (1961, 1964, 1965 y 1967) y fue nombrado Jugador Más Valioso de la Liga Nacional en 1966.
Presencia en el Juego de Estrellas:
Clemente fue seleccionado para el Juego de Estrellas en 15 ocasiones, lo que demuestra su consistencia y alto nivel de juego. En el Juego de Estrellas de 1971, bateó un jonrón crucial para ayudar a la Liga Nacional a obtener la victoria.
Clemente era conocido por su filantropía y su dedicación a ayudar a los demás. Fundó la Fundación Roberto Clemente para brindar asistencia a los necesitados en Puerto Rico y otras partes del mundo. Su trágica muerte en un accidente aéreo mientras transportaba suministros para las víctimas de un terremoto en Nicaragua conmocionó al mundo, pero su legado de generosidad y compromiso continúa inspirando a las generaciones venideras.