Ley de Murphy, le dicen. La noche de este jueves se jugaba el último de la serie entre Cañeros de Los Mochis y Águilas de Mexicali, en la Liga Arco Mexicana del Pacífico (LMP), cuando “pasó lo que menos pensaban que pasaría”.
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Para ese momento, el compromiso se encontraba siete (7) carreras por una (1) a favor del conjunto de Mexicali. Cotejo que se disputó en el estadio Emilio Ibarra, ubicado en la ciudad de Los Mochis, Sinaloa.
El "blooper" del año
Corría el cuarto capítulo cuando Alex Mejía, bateador en turno, levantó un largo elevado a la zona del jardín izquierdo, cerca de la zona de foul. El jardinero de Cañeros de Los Mochis, Eric Filia, corrió hasta tomar la pelota, sin embargo, cometió una pifia de la que seguramente nunca se olvidará.
El nacido en California perdió la cuenta y regaló una pelota al público, a pesar de haber hecho una buena obra con un niño que esperaba ansioso el souvenir, pues olvidó que solo había dos outs en la pizarra y eso abrió la puerta para que los hombres de Mexicali que estaban en tercera y segunda base llegaran a la registradora y apuntaran dos más en favor de los fronterizos.
Por más que el público que se encontraba en dicha zona del estadio le hacía señas con las manos para que se diera cuenta y sus compañeros le gritaron para que lanzara la bola al cuadro nuevamente, Filia ya había entregado las 108 costuras y el daño para los Cañeros de Los Mochis estaba hecho.
Al final, la cuenta creció aún más para los emplumados, quienes se llevaron una cómoda ventaja de territorio mochiteco por pizarrón de 13 carreras por una (1).