El programa de Parole Humanitario, una vía de acceso a los Estados Unidos para ciudadanos de Venezuela, Cuba, Haití y Nicaragua, se enfrenta a un nuevo obstáculo. La implementación del cobro de $30 dólares por la toma de huellas dactilares a los patrocinadores aún no ha sido aprobada oficialmente por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS). Este retraso está generando incertidumbre entre los solicitantes y sus patrocinadores.
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¿Por qué se demora la autorización?
El cobro de las huellas dactilares es un nuevo requisito que busca reforzar los mecanismos de seguridad en el proceso de validación de patrocinadores. Sin embargo, al ser una medida adicional, requiere de una aprobación formal por parte del DHS y un proceso de revisión en el Registro Federal.
A pesar de que se presentó una solicitud de emergencia para agilizar este proceso, se espera que la decisión final se tome antes del 20 de septiembre.
Impacto en los solicitantes
Este retraso genera incertidumbre entre los solicitantes y sus patrocinadores, quienes esperan poder avanzar en sus trámites migratorios. Es importante destacar que hasta que se apruebe el cobro de las huellas dactilares, este requisito no será obligatorio para las nuevas solicitudes ni para los casos pendientes.
Recomendaciones para los solicitantes
- Mantenerse informado: Es fundamental que los solicitantes y patrocinadores estén atentos a las actualizaciones oficiales del USCIS a través de sus cuentas de myUSCIS.
- Cumplir con los requisitos: Una vez que se apruebe el cobro de las huellas dactilares, es crucial que los patrocinadores asistan a la cita correspondiente para realizar el pago y la toma de huellas.
- Ser paciente: El proceso migratorio puede ser largo y complejo. Se recomienda mantener la calma y seguir las instrucciones proporcionadas por las autoridades migratorias.
¿Por qué es importante este cobro?
La toma de huellas dactilares es una medida de seguridad que permite verificar la identidad y los antecedentes de los patrocinadores. Esto ayuda a garantizar que los beneficiarios del programa sean recibidos por personas que puedan brindarles el apoyo necesario y que no existan riesgos de fraude o tráfico de personas.
El futuro del programa de Parole Humanitario está ligado a la resolución de este pendiente. Se espera que el DHS apruebe pronto el cobro de las huellas dactilares, lo que permitirá avanzar en el procesamiento de las solicitudes y brindar certeza a los solicitantes y sus patrocinadores.