En un anuncio que ha sorprendido al mundillo del tenis, Novak Djokovic ha comunicado este martes la separación profesional de Andy Murray, su entrenador durante los primeros meses de la temporada 2025. La decisión llega en un momento crucial, justo en vísperas de Roland Garros, uno de los torneos más prestigiosos del calendario y donde ambos tenistas aspiraban a dejar huella, especialmente con la mirada puesta en cerrar o ampliar su legado.
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Colaboración prometedora con resultados decepcionantes
La relación entre Djokovic y Murray surgió en noviembre pasado, cuando el tenista serbio decidió cambiar de entrenador tras su vínculo con Goran Ivanisevic. En busca de una figura de confianza para afrontar sus últimas temporadas en el circuito, Djokovic eligió a Murray, quien recientemente completó su retirada en los Juegos Olímpicos de París. La idea era que el escocés, un exnúmero uno del mundo y campeón de múltiples Grand Slams, ayudara a preparar los torneos iniciales del 2025, incluyendo el Open de Australia.
Lo que parecía un acuerdo con altas perspectivas, pronto mostró serios desafíos. A pesar de haber formado una amistad sólida y una alianza que en principio prometía potenciar ambos cuerpos técnicos, los resultados en pista no acompañaron las expectativas. Djokovic, tradicionalmente uno de los jugadores más competitivos y con más opciones en el circuito, empezó a mostrar signos de dificultades en sus campeonatos iniciales del año.
La temporada comenzó con una derrota en el Open de Australia, donde Djokovic cayó en semifinales, frustrando sus aspiraciones de levantar un título en esa superficie.
Posteriormente, en Indian Wells, Montecarlo y Madrid, el serbio fue eliminado en las primeras rondas, resultados que no sólo afectaron su confianza, sino que también aceleraron la decisión de finalizar su colaboración con Murray. La relación, que prometía una revitalización para uno de los jugadores más laureados de la historia del tenis, no alcanzó a consolidarse.
Andy Murray, por su parte, encontró motivación en volver a trabajar con un ícono del tenis, tras su retiro en París. Sin embargo, la serie de resultados negativos evidenció que la sinergia no funcionaba como se esperaba, llevando a Djokovic a tomar esta difícil decisión.
Agradecimiento y los próximos pasos
En redes sociales, Novak Djokovic expresó su gratitud hacia Andy Murray: "Gracias, entrenador Andy, por todo el esfuerzo, la diversión y el apoyo durante los últimos seis meses dentro y fuera de la cancha. Disfruté mucho profundizando nuestra amistad".
Tras su salida del Masters 1000 de Roma, Djokovic participará en el ATP 250 de Ginebra como preparación para Roland Garros, donde aspira a mejorar sus resultados y recuperar confianza para lo que será una segunda parte de temporada crucial. La ruptura con Murray, aunque inesperada, marca un momento de ajuste en la preparación del serbio de cara a uno de sus objetivos principales del año.
