El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha declarado que impondrá aranceles del 15% a Venezuela, en lo que ha denominado el "Día de la Liberación". Durante un discurso en el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca, Trump enfatizó su intención de reducir la dependencia de Estados Unidos de productos importados, proclamando que el 2 de abril de 2025 será recordado como un hito en el renacimiento de la industria estadounidense.
Aranceles regionales y su impacto
Este nuevo conjunto de aranceles no solo afecta a Venezuela, sino que también se extiende a otros países sudamericanos. Colombia, Chile, Argentina y Brasil enfrentarán un arancel del 10%. Estas tarifas son parte de una estrategia más amplia que busca reestructurar las relaciones comerciales de Estados Unidos con la región.
China: El principal objetivo
Entre los países más perjudicados por estas nuevas políticas arancelarias se encuentra China, que enfrentará un gravamen del 34%. Trump justificó esta medida al señalar que China impuso tarifas del 67% a productos estadounidenses. "Les cobraremos aproximadamente la mitad de lo que ellos nos cobran a nosotros", afirmó el expresidente, subrayando su enfoque hacia una política comercial más agresiva.
Reciprocidad limitada
Durante su intervención, Trump aclaró que estas medidas no son completamente recíprocas. "Esto no es totalmente recíproco. Es una especie de reciprocidad", explicó, indicando que su administración está dispuesta a tomar medidas unilaterales para proteger los intereses económicos estadounidenses.
Consecuencias globales
El cambio en la política comercial estadounidense podría tener repercusiones significativas no solo para las economías afectadas, sino también para el comercio global en general. Los nuevos aranceles plantean interrogantes sobre la estabilidad de las relaciones comerciales internacionales y el impacto en los mercados globales.
