El Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (SAIME) aplica una medida para los ciudadanos que se demoren en el retiro de sus documentos. Se trata de una multa, cuyo pago debe ser cancelado en base a un arancel al momento de acudir a la oficina. Esto, de acuerdo a lo estipulado en la Providencia Administrativa 043, en el artículo 25.
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En este sentido, el usuario tiene un plazo máximo de 30 días hábiles o 45 días continuos para solicitar su cédula de identidad o su pasaporte en la sede correspondiente.
Cabe destacar que, en caso de no ser retirado el documento de identificación transcurrido un período de 90 días continuos, será enviado a la Dirección de la sede central, situada en Plaza Miranda, Caracas.
Mientras que, en otros casos el usuario deberá tramitar nuevamente el pasaporte, cancelando el documento y obteniendo la cita respectiva.
Por último, el costo del arancel estaba anclado al criptoactivo Petro, equivalente a 60 dólares, de acuerdo a lo señalado por el organismo en sus plataformas digitales.