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En un mundo cada vez más digitalizado, los delincuentes buscan constantemente nuevas formas de estafar a través de dispositivos móviles, y una de las últimas modalidades detectadas es la estafa por WhatsApp. Esta práctica se aprovecha de la popularidad de aplicaciones de mensajería instantánea para engañar a las víctimas y robar sus datos personales y financieros.
El modus operandi de esta estafa implica el uso de una videollamada en la que el estafador menciona un problema técnico, como una cámara que no funciona, para persuadir a la víctima a compartir su pantalla. Una vez que la víctima cae en la trampa, el estafador puede obtener acceso a todo el contenido de su dispositivo y tomar el control de su cuenta de WhatsApp.
Además de la estafa por WhatsApp, el phishing sigue siendo una amenaza importante en el ciberespacio. Esta técnica consiste en el envío de comunicaciones fraudulentas que parecen legítimas, con el objetivo de engañar a las personas para que revelen información confidencial. En Venezuela, este tipo de prácticas fraudulentas ha estado siendo denunciada con mayor frecuencia en los últimos tiempos.
Para prevenir estas estafas, es fundamental utilizar contraseñas seguras, verificar la autenticidad de los sitios web, tener precaución con los correos electrónicos sospechosos y activar la autenticación de dos pasos cuando sea posible. También es importante estar atento a los códigos de país de números internacionales, ya que algunos códigos poco comunes pueden ser indicativos de una estafa.
Así que, si recibe un mensaje de WhatsApp de un número desconocido, es recomendable realizar una pregunta personal para verificar la identidad del remitente, así como bloquear y reportar el número si es necesario. La prevención y la vigilancia son clave para protegerse contra las estafas cibernéticas en la era digital.