El propietario de los Dallas Cowboys, Jerry Jones, sorprendió al declarar que no descarta renovar el contrato del actual entrenador en jefe, Mike McCarthy, a pesar del complicado presente del equipo, que marcha con un récord de 4-7 y ocupa la antepenúltima posición en la Conferencia Nacional. Las dudas sobre McCarthy se han incrementado tras una serie de derrotas que han comprometido las aspiraciones de Dallas en la temporada 2024.
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Confianza en las "buenas ideas" del entrenador
En una reciente entrevista, Jones describió a McCarthy como un entrenador con “muy buenas ideas” y experiencia comprobada. Según el propietario, aún hay margen para revertir la situación, dado que el equipo tiene uno de los calendarios más accesibles en las semanas restantes.
Aunque el desempeño hasta ahora no ha sido el esperado, Jones destacó la importancia de mantener la continuidad y evitar decisiones apresuradas.
“No hay nada en mi lenguaje corporal que indique que hemos decidido el futuro de nuestro staff”, afirmó Jones, subrayando que todavía queda mucho fútbol por jugar en la temporada.
Los números no acompañan
Desde que McCarthy asumió en 2020, los Cowboys han logrado cierta estabilidad en temporada regular, pero sus recurrentes fallos en los playoffs han generado críticas. Este año, el equipo enfrentó una racha de cinco derrotas consecutivas antes de vencer a los Washington Commanders, un respiro que aún los deja muy lejos de los puestos de playoffs. Dallas está a 2.5 juegos del último lugar disponible en la postemporada, con varios equipos por delante.
El bajo rendimiento ha puesto presión sobre la gestión de McCarthy, quien ha sido incapaz de llevar al equipo más allá de la segunda ronda de playoffs, un estigma que Dallas arrastra desde su último campeonato en 1995.
Decisión difícil al final de la temporada
Aunque Jones no descartó una extensión de contrato, cualquier decisión dependerá del cierre de la campaña. Si los Cowboys logran encadenar victorias y mantenerse en la pelea, McCarthy podría recibir una nueva oportunidad. Por otro lado, un cierre decepcionante podría llevar a Dallas a buscar alternativas en el mercado de entrenadores.
Por ahora, la prioridad de los Cowboys es ganar los próximos encuentros, comenzando con el enfrentamiento del Día de Acción de Gracias contra los New York Giants, y mantener viva la esperanza de un milagro en la recta final de la temporada.
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