Cierre Wood, exjugador de la NFL, ha sido sentenciado a cadena perpetua en Las Vegas tras ser encontrado culpable del asesinato de La’Rayah Davis, una niña de cinco años que era la hija de su novia. La sentencia marca un oscuro desenlace para Wood, quien ahora pasará el resto de su vida en prisión sin posibilidad de libertad condicional.
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El incidente que llevó a esta sentencia ocurrió en abril de 2019. Según los informes, La’Rayah Davis murió tras sufrir múltiples lesiones mientras estaba bajo el cuidado de Wood y su madre, Amy Taylor.
Las investigaciones revelaron que la niña presentaba moretones y otras señales de maltrato físico, lo que llevó a la policía a detener a Wood poco después de la muerte de la pequeña. Durante el juicio, se presentaron pruebas contundentes que demostraron el abuso sistemático al que fue sometida la menor, con Wood como principal responsable.
Una sentencia que sacude al mundo del deporte
Además de la cadena perpetua por asesinato, Wood, de 33 años, recibió una sentencia adicional de entre 28 meses y 6 años por abuso infantil, que cumplirá de manera consecutiva. Esta condena refleja la gravedad de los crímenes cometidos por el exjugador, quien en el pasado tuvo una breve carrera en la NFL, donde jugó como corredor para equipos como los Houston Texans, New England Patriots y Buffalo Bills. Sin embargo, su carrera en el fútbol americano nunca alcanzó el éxito esperado, y tras su paso por la NFL, Wood intentó continuar su carrera en la Liga Canadiense de Fútbol (CFL) sin mucho éxito.
El caso ha causado gran conmoción en el mundo del deporte y en la comunidad en general, no solo por la brutalidad del crimen, sino también por la caída en desgracia de un exatleta que, en algún momento, fue visto como un prometedor jugador de fútbol americano. La sentencia de cadena perpetua cierra un capítulo trágico para todas las partes involucradas y sirve como un recordatorio de las terribles consecuencias del abuso infantil y la violencia doméstica.
Wood optó por una declaración Alford, un tipo de acuerdo que le permitió declararse culpable mientras mantiene su inocencia, lo que facilitó el proceso judicial y evitó un juicio más largo y traumático para los involucrados. Ahora, Cierre Wood enfrenta un futuro sombrío tras las rejas, mientras la familia de La’Rayah Davis busca justicia y paz tras la pérdida irreparable de la pequeña.