Los Ángeles Rams sorprendieron este domingo con un triunfo 44-42 sobre los Buffalo Bills en la semana 14 de la temporada de la NFL, dejando a los campeones del Este de la Conferencia Americana (AFC) con un amargo sabor de derrota. A pesar de una actuación histórica de Josh Allen, los Bills no pudieron contener a Matthew Stafford y a un inspirado equipo de los Rams, que sigue luchando por un puesto en los playoffs.
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La histórica actuación de Josh Allen no fue suficiente
Josh Allen tuvo una noche que quedará registrada en los libros de historia de la NFL. El mariscal de campo de los Bills lanzó para 342 yardas y tres pases de anotación, completando 22 de sus 37 intentos de pase.
Además, fue una amenaza constante en el ataque terrestre, anotando otros tres touchdowns por tierra y liderando a su equipo en yardas terrestres con 82 en ocho acarreos.
Sin embargo, ni siquiera esta sobresaliente actuación fue suficiente para superar a unos Rams que jugaron con determinación y eficiencia.
Los Rams se acercan a los playoffs
Con esta victoria, Los Ángeles Rams ascendieron al segundo lugar del Oeste de la Conferencia Nacional (NFC) con un récord de 7-6, manteniéndose en la lucha por un boleto a los playoffs.
Matthew Stafford lideró a su equipo con dos pases de anotación, mientras que Kyren Williams aportó dos touchdowns por la vía terrestre, cimentando el triunfo del equipo angelino.
Por su parte, los Bills, ahora con marca de 10-3, siguen en la cima del Este de la AFC, pero este tropiezo frena su persecución de los Kansas City Chiefs (11-1) en la búsqueda de terminar como los mejores de la conferencia.
El partido fue un verdadero espectáculo ofensivo, con ambos equipos intercambiando anotaciones hasta el último cuarto. Los Rams sellaron su victoria con una sólida actuación defensiva en los momentos cruciales, evitando que Buffalo completara un regreso en los últimos minutos.
Esta derrota deja a los Bills con la tarea de corregir errores si quieren mantener su dominio en la AFC y llegar en buena forma a los playoffs. Para los Rams, este triunfo es una inyección de confianza que los mantiene vivos en una temporada que parecía perdida semanas atrás.