Este 5 de febrero de 2025, se cumplen ocho años de una de las gestas más memorables en la historia del fútbol americano: la remontada de los New England Patriots en el Super Bowl LI, liderada por el legendario mariscal de campo Tom Brady. Aquel 5 de febrero de 2017, en el NRG Stadium de Houston, los Patriots se enfrentaban a los Atlanta Falcons en una contienda que pasaría a los anales del deporte.
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Los Falcons dominaron la primera mitad del encuentro, llegando al descanso con una ventaja de 21-3. La situación se agravó para los Patriots cuando, en el tercer cuarto, los Falcons ampliaron su ventaja a 28-3 tras un pase de touchdown de Matt Ryan. En ese momento, pocos podían prever el giro que tomaría el partido.
La remontada histórica
Con poco más de 17 minutos restantes en el tiempo reglamentario, los Patriots iniciaron una remontada sin precedentes. Tom Brady, demostrando por qué es considerado uno de los mejores mariscales de campo de todos los tiempos, lideró a su equipo en una serie de anotaciones que igualaron el marcador a 28 puntos, forzando así la primera prórroga en la historia del Super Bowl. En el tiempo extra, los Patriots culminaron su hazaña con un touchdown de James White, sellando una victoria de 34-28.
Este partido estableció numerosos récords. Brady completó 43 de 62 pases para 466 yardas y dos touchdowns, estableciendo marcas en intentos, completaciones y yardas en un Super Bowl. James White, por su parte, registró 14 recepciones para 110 yardas y anotó tres touchdowns, otro récord en la historia del Super Bowl. La remontada de 25 puntos sigue siendo la mayor en la historia del Super Bowl, consolidando este juego como una de las mayores proezas deportivas jamás vistas.
Ocho años después, la épica remontada de los Patriots en el Super Bowl LI continúa siendo un referente de resiliencia y determinación en el deporte, y el liderazgo de Tom Brady en aquella noche memorable sigue inspirando a generaciones de aficionados y jugadores por igual.