El legendario mariscal de campo Aaron Rodgers sorprendió al mundo del fútbol americano este martes al declarar que la temporada 2025 será, con alta probabilidad, la última de su carrera profesional, marcando el cierre de una era en la NFL.
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Rodgers se prepara para su retiro definitivo tras una última campaña con los Steelers
A sus 41 años, el cuatro veces MVP de la liga confirmó que firmó un contrato por solo un año con los Pittsburgh Steelers, dejando en claro que no tiene planes de extender su trayectoria más allá del 2025. En declaraciones ofrecidas durante su participación en “The Pat McAfee Show”, Rodgers fue contundente: “Estoy bastante seguro de que esto es todo. Por eso solo hicimos un contrato de un año. Los Steelers no necesitaban añadir más años ni nada”.
Rodgers, quien llega a Pittsburgh tras dos temporadas frustradas por lesiones con los New York Jets, acordó un salario base de 13,65 millones de dólares, con la posibilidad de alcanzar 19,5 millones mediante incentivos, según cifras de Spotrac. Sin embargo, más allá del dinero, su decisión parece estar guiada por el deseo de una despedida emocional y significativa.
“Esto realmente se trata de terminar con mucho amor, diversión y paz para la carrera que he tenido”, afirmó el veterano quarterback, quien aseguró que el vínculo con el entrenador Mike Tomlin fue clave en su elección: “Ha sido un largo recorrido y lo he disfrutado, y qué mejor lugar para terminar que en una de las franquicias emblemáticas de la NFL, con Mike Tomlin y un gran grupo de liderazgo”.
Una retirada en silencio y lejos de los reflectores
Rodgers también aprovechó la entrevista para hablar de su vida personal, revelando que está casado con una mujer llamada Brittani, cuyo apellido y detalles se ha reservado para mantenerla alejada del escrutinio mediático. El exjugador de los Packers expresó su hartazgo con el espectáculo público que rodeó sus relaciones anteriores: “No quería nada de eso, no me gustó nada de eso, y ahora estoy con alguien que no se inscribió para ser una celebridad”.
Sobre lo que viene después de colgar los botines, Rodgers fue tajante: “Cuando todo esto termine, será como Keyser Soze. No me verás. No voy a estar en el ojo público”.
Así, si nada cambia, 2025 será el año en que la NFL diga adiós a uno de los quarterbacks más influyentes y carismáticos del siglo XXI. Una despedida que promete estar cargada de emoción, legado y, como él mismo lo desea, un cierre en paz.