El partido entre Las Palmas y Barcelona tuvo un momento de gran controversia al minuto 80, cuando una jugada en el área azulgrana generó reclamos por parte del conjunto local. Eric García desvió el balón con la mano dentro del área en una acción que inicialmente parecía ser un claro penal a favor de Las Palmas.
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El árbitro Adrián Cordero Vega detuvo el juego de inmediato y recibió la asistencia del VAR para revisar la jugada. Mientras los jugadores de Las Palmas pedían la pena máxima, la revisión en video determinó que había una posición adelantada previa en la jugada ofensiva, lo que invalidaba por completo la acción y dejaba sin efecto el reclamo por el penal.
Cordero Vega dictamina fuera de juego y desata protestas
Tras analizar la repetición, Cordero Vega ratificó la decisión de anular la jugada por fuera de juego antes del contacto con la mano de Eric García. Esto provocó la frustración en los jugadores y la afición local, quienes esperaban la posibilidad de igualar el marcador en los minutos finales del partido.
El encuentro, ya marcado por la intensidad y el roce físico, sumó un nuevo episodio de polémica con esta acción, que mantiene al Barcelona con la ventaja mínima en el Estadio de Gran Canaria. Mientras Las Palmas sigue buscando el empate, los azulgranas intentan cerrar el partido para mantenerse en la cima de LaLiga.