Todas las alarmas de la Vinotinto se encendieron en el partido de ida de la semifinales de la Copa Sudamericana, entre Corinthians vs Racing. En dicho encuentro, José "Brujo" Martínez salió lesionado y con muchas molestias para caminar, tanto que el cuerpo técnico tuvo que ayudarlo a retirarse del campo en el minuto 25 de primer tiempo.
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Esa imagen dejó muy preocupados a los aficionados venezolanos, puesto que, la fecha FIFA de noviembre está a la vuelta de la esquina y el "Brujo" es pieza clave en el esquema de Fernando "Bocha" Batista. Sin embargo, parece haber una luz de esperanza con respecto al período de recuperación que tendrá que pasar el criollo.
De acuerdo a la información del periodista, Pedro Bozo, el "Brujo" Martínez sufrió un esguince de tobillo que lo descarta al 100% de jugar el próximo partido de su combinado. Pero lo que ilusiona a la hinchada, es que dentro del club trabajan para que pueda estar presente en el partido de vuelta ante Racing, el jueves 31 de octubre.
No peligraría su presencia en las Eliminatorias
A la Vinotinto le espera partidos muy complicados en el parón de selecciones, teniendo que enfrentar a Brasil y Chile en las jornadas de Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026. Por ello, desean contar con todos sus jugadores importantes en la última fecha FIFA del 2024.
Si el "Brujo" Martínez logra recuperarse tendrá dos compromisos ligueros para ponerse a tono y llegar de la mejor forma posible a los juegos de Venezuela. Su importancia en el equipo nacional es indiscutible, dando equilibrio y seguridad en la mitad de la cancha.
¿El mejor acompañante para Yangel Herrera, Cristian Cásseres Jr. y Telasco Segovia?
El "Brujo" Martínez, con su capacidad de recuperación, visión de juego y distribución precisa del balón, se encarga de proteger la defensa, cortar circuitos de juego rivales y iniciar las acciones ofensivas.
Esta seguridad que brinda en la zona medular libera a jugadores como Yangel Herrera, Cristian Cásseres Jr. y Telasco Segovia, quienes pueden adentrarse más en campo rival, asociarse con los delanteros y generar ocasiones de gol. En pocas palabras, es el ancla que permite que los demás talentos florezcan y la Vinotinto pueda desplegar un juego más ofensivo.