Avelino Avancín
Acarigua. Cada día son más evidentes sus progresos como árbitro, hablamos del llanero Orlando Bracamonte. Su historial esta lleno de grandes anécdotas. Recuerda que era comentarista en un programa de radio en su natal Acarigua y también jugaba fútbol como volante de primera línea. En el 2014 se anima a participar en un curso para árbitros. En el 2015 hace su debut como principal en Puerto Ayacucho en un partido entre Tucanes y Caracas. Recuerda que esa tarde hizo su debut como cancerbero de los rojos del Ávila el internacional Wilker Faríñez. El primer jugador al que amonestó en su carrera fue al defender Rubert Quijada.
Así decidió acompañar en este exigente oficio a su paisano Jesús Valenzuela, considerado uno de los mejores del continente, quien viene de pitar la final de la pasada Copa America de Brasil. El portugueseño dice que este trabajo le apasiona y es bastante exigente. “Hay que tener mucha ética, disciplina, moral y valores”, dice con mucha convicción. Durante su ascendente trayectoria ha pitado en varias finales como la Mineros-Lara, Caracas-Estudiantes de Mérida y Lara-La Guaira, además de encuentros correspondientes a varios suramericanos. Desde el 2019 es juez FIFA.
Recientemente el orgullo de Campo Lindo fue cuarto arbitro en Montevideo de un duelo entre Nacional de Uruguay ante el Internacional brasileño, en fase de octavos de final de la Copa Libertadores. “Fue un gran honor compartir con el principal argentino Néstor Pitana, quien pitara en la final del Mundial de Rusia. Un gran amigo y súper humilde, quien me dio muchos consejos. Espero triunfar y seguir el ejemplo de Jesús Valenzuela y del querido Ramón Ortega. Se nos están abriendo muchas puertas a los colegas de mi país y esperamos seguir creciendo y superarnos”, finalizó diciendo Bracamonte, quien tiene 36 años.