Argentina ha vivido una semana histórica en el fútbol, tras vencer a Brasil en tres frentes diferentes: las Eliminatorias Sudamericanas, los Juegos Parapanamericanos y el Mundial Sub-17.
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El martes, la selección absoluta argentina se impuso por 1-0 a Brasil en el Maracaná, con un gol de Nicolás Otamendi. Este fue el segundo triunfo de Argentina en el Maracaná desde 2021, y supuso un duro golpe para Brasil, quien cayó por primera vez como local en las eliminatorias y aspira a clasificarse para el Mundial de 2026.
El miércoles, la selección paralímpica argentina también se impuso a Brasil por 1-0 en los Juegos Parapanamericanos de Chile. El gol de la victoria lo marcó Maxi Espinillo.
Y este viernes, la selección sub-17 argentina goleó a Brasil por 3-0 en el Mundial Sub-17 de Indonesia. Los goles fueron anotados por Claudio Echeverri, quien se desató con un Hat Trick ante la canarinha.
Por un lado, estas derrotas ponen en duda el dominio de Brasil en el fútbol sudamericano. La selección brasileña es la pentacampeona del mundo y siempre ha sido considerada como la mejor de la región en todas sus disciplinas. Sin embargo, las victorias de Argentina ponen de manifiesto que el fútbol argentino está en un gran momento y que puede competir de tú a tú con Brasil.
Por otro lado, estas derrotas son un duro golpe para el orgullo brasileño. Brasil es un país futbolero y la selección nacional es un símbolo de la identidad nacional. Las derrotas ante Argentina son un recordatorio de que Brasil no es invencible y que puede ser superada por su acérrimo rival.