Un suceso que desató polémica en el mundo del fútbol fue el encuentro de este martes entre el atacante francés Kylian Mbappé, hoy ligado al Paris Saint-Germain, con el presidente de la República Francesa Emmanuel Macron y el Emir del Estado de Qatar Tamim bin Hamad Al Thani.
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Dicha reunión en el Palacio del Eliseo en París causó revuelo debido a la influencia de ambos jefes de Estado en el club parisino, considerando que el Estado qatarí funge como su propietario, y la decisión del jugador de no renovar su contrato al final de la presente campaña y firmar por el Real Madrid en verano.
"Nos vas a crear más problemas", manifiesta en tono de broma el presidente Macron a Mbappé delante de Al Thani, palabras que fueron tomadas como un tipo de presión hacia el capitán de la selección francesa por parte de la prensa internacional, ya que el presidente galo ya había incurrido en esta práctica en anteriores ocasiones.
Sin embargo, el delantero no se reunió con el jefe de Estado francés y el mandamás qatarí por cuestiones deportivas, sino que tuvo como motivo principal la posición de Francia en el conflicto entre Israel y Palestina, donde Qatar busca ser mediador. Mbappé, más bien, asiste a este encuentro como personalidad de renombre en el país.
De igual forma, el futbolista le dejó claro al Emir Tamim bin Hamad al Thani que, de cara a la campaña 2024, se marchará del PSG: "Me quedo más tranquilo si se lo digo a la cara: he decidido cambiar de aires, espero que lo entienda", a lo que el monarca respondió sonriente, deseándole buena suerte en su futuro.
A pesar de que Mbappé no continuará en el elenco parisino después de que finalice la temporada, también ha dejado claro que quiere marcharse de la mejor forma y dará el cien por ciento en el tramo final de su estadía en el club.